En San Luis hay mucho talento: Jorge Cuevas

Hay mucho talento aquí en San Luis, si hubiera una competencia o algo así entre estados, creo que San Luis sería de los mejores, sin duda alguna, señaló convencido Jorge Cuevas, uno de los más prometedores talentos potosinos.

Hijo del reconocido pintor Arturo Cuevas, desde muy joven mostró inclinación por las artes plásticas, con lo que ha obtenido reconocimiento a pesar de ser muy joven.

Soy muy cambiante

Las obras que más reconocimiento han recibido son Rodolfa y Dorothy, pinturas con las que dice se siente más él, hasta el momento.

El joven artista dijo que “esas son las que con las que soy más yo. Soy así no sé, a veces son pinceladas largas que no importa y otras veces que sí me enfocó un poquito más soy muy cambiante, a veces dices ya este tipo de pintura ya no me gusta, la voy a cambiar, voy a no sé, abrir mi mente y hacer otro tipo de cosas”.

Dijo que “coincidió con un mal momento, donde ¿qué hago? porque sigo en búsqueda de mi estilo, entonces coincidió un poco, estar en ese momento como bajoneado pinté a Rodolfa y pues ahí me dejé ir un poco con las rayas y todo y que es lo que me gustó mucho, y creo que desde ahí he seguido más o menos con ese estilo”.

El retrato es esa pequeña adrenalina

Y aunque no ha definido su estilo, lo que más ha trabajado hasta ahora son los retratos, “porque ahí pues tiene que ser exactamente el dibujo perfecto. Dónde va la sombra, dónde va el color, la luz, todo, todo, creo que los retratos son un poquito más complicados, como el no sé, el nervio decir, ay, sí me va a quedar, no le va a gustar, sí le va a gustar o hay me encantó, híjole, pues más o menos o no sé, es como esa pequeña adrenalina de a ver qué onda”.

A mí lo que me gusta es pintar

Jorge Cuevas dijo que “desde el principio dibujo, sí, me gusta, pero a mí lo que me gusta es pintar. Ya después yo creo que voy a empezar con cosas un poquito más abstractas. No he incursionado en eso, pero sí me llama mucho la atención”.

Dijo que además “hago un poco de impresionismo con realismo, con no sé otras vanguardias. A veces que estoy un poco contento o algo, es cuando como que meto más color, como que me dejó ir un poco más y pues a veces tengo otro humor y hago cosas un poco más, como una pintura de allá, que simplemente es para relajarme o ver qué hago. Depende de mi estado de ánimo, de cómo va a manchar, como voy a si la pincelada va a ser suelta o más técnica o cosas así”.