La investigadora tapatía Elena Anaya Haume condujo una investigación de largo aliento acerca de los factores que influyen en que un matrimonio sea exitoso o no en la Zona Metropolitana de Guadalajara (ZMG).
A través de un cuestionario que diseñó a la par de dos profesores de la Universidad de Navarra, la doctora en neurociencias y cognición llegó a la conclusión de que las parejas en municipios como Guadalajara y Zapopan terminan sobre todo por no atender a tiempo problemas emocionales y psicológicos.
"Personas que por características en su personalidad, vivencias de la vida, se conducen con una mala gestión de emociones como la ira, la tristeza o la ansiedad. Eso provocó en la pandemia el quebranto de muchas relaciones", explicó Anaya.
"Es el factor personal que más influye en cómo perciben afecto las personas, una persona con alto neuroticismo no percibe adecuadamente la admiración y el cariño que otras personas le tienen, esto genera que no se sientan queridos y predispone a una mala actitud en la pareja".
Entre las claves para resolver los problemas que separan buena parte de los matrimonios al centro del Estado está atender la salud mental a tiempo.
"Si están en una pareja dramática, que rompen y vuelven constantemente, donde todo es motivo de celos, se levantan fácilmente la voz, se sienten vulnerables e indefensos en la relación, necesitan darse cuenta de que o están con la persona equivocada o claramente tienen que atender su inestabilidad emocional", explicó.
