Oscar Esquivel | 07/04/2022 | 23:37
Todo se reduce a pleito de cantina, de esos que nadie sale lastimado, pero si con una resaca de aquellas que no se olvidan, ya sea por el licor ingerido en cantidades exorbitantes o el coraje de quedarse con las ganas de eliminar por completo al adversario, que minutos antes eran compadres de barra, brindando por el triunfo del Necaxa, o de plano por la mujer que los dejo, ¡por borrachos!
Nuestra vida de mexicano se va en mirar de manera estupefacta el pleito de cantina de dos sujetos, el señoritingo y el desarrapado, ellos nos echaron a perder la tarde de convivio, por un lado, no se perdonan el uno a otro el mirarse feo. Los señoritingos, se han convertido en verdaderas chachalacas de la política, cotorras en celo, o peor aún, parvada de cuervos que como buenos pandilleros que se sienten desplumados después de perder el poder, atacan todo y a todos, sus lideres no mas no dan una, lloran por el poder que dejaron por corruptos e incapaces de generar paz y confianza ciudadana. Los desarrapados incomprendidos son los que a su triunfo arrollador y después de estar en la pobreza. hoy administran la riqueza, los hace verse a sí mismos como héroes sacados del libro vaquero, rescatando a la muchedumbre del hambre de la ignorancia.
Esta es la manera esquizofrénica de las dos facciones políticas mexicanas, actuando por sus propios intereses, la agenda para el desarrollo político, económico y social, les interesa un bledo, les es más importante el cambio de color que tendrá el mar caribe, por la construcción del Tren Maya (según una senadora conservadora…ignorante), que la consecuencia de las bondades de la construcción del tren, sin dejar a un lado las pifias de la mega construcción, un sinnúmero de cambios en el trazo sin dejar de contar las atrocidades ambientales, sin embargo se mueve.
En un tiempo no muy lejano veremos a ricos y pobres viajando en el tren, así como haciendo uso de manera regular el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles, tanto grito y sombrerazo para nada, la verdad ya aburre.
Y como los demonios deambulan en esta sociedad bien informada, con una cultura altamente democratizada, que lee un libro al año, y distingue perfectamente un sistema de medios de comunicación imparcial profesional sin partidismos ni colores ¡Zas! Se le aparece el chamuco nuevamente; cuando apenas con su espada vengadora la oposición no ha podido ni trasquilar al diablito de las megas obras del sexenio, un monstruo mayor de mil cabezas se apodera de sus escuálidas voces, la Revocación de Mandato, patalean dicen, se admiran, se emberrinchan y nada. El gobierno federal y todos sus miembros, en franco desafío a la autoridad electoral, promueven sin reparo la revocación como un instrumento legal para eliminar a los malos gobernantes, y ya después, si es el caso, votar por la permanencia de López Obrador en la presidencia.
De que se espantan si eso se ha hecho siempre, en todas las campañas, después de las 18:00 entre semana, sábados y domingos, todo funcionario se da a la terea de levantarle la mano en algún mitin a algún candidato por impresentable que sea, los recursos del gobierno para algo sirven.
Ante una disyuntiva como esta ¿Quién tiene el pecado más grande? Quien promueve o quien no, la oposición llama a no asistir a votar, no ejercer el voto, tanto que se unieron a FRENA, en marchas, en caravanas de primavera con autos de lujo paseándose en la Salvador Nava o en protestas de campamento como niños exploradores con casas de campañas vacías, tanto se hizo para pedir la destitución del presidente y hoy que tienen hasta el arbitro de su lado, al INE, no aprovechan la oportunidad.
Un árbitro que se acomoda a sus intereses obstaculizando el partido, incluso antes de comenzar, creyendo que todo saldrá bien a su favor, de no resultar como lo pretendieron, ese arbitro debe dejar la cancha.
Dirán no es la institución son sus miembros, bueno sus miembros deben irse del INE.
En un sistema político de partidos como el nuestro, cada uno de ellos y como columna vertebral de sus principios básicos es la promoción de la política, la instrumentación para desarrollar una convivencia democrática de la sociedad, generar participación activa en todos los aspectos de la vida nacional, no solo en la conveniencia de los intereses individuales.
Entendible es el miedo a ridiculizase de los partidos políticos agrupados en Va por México, porque se olvidaron de generar condiciones de participación, sin tener el poder en el ejecutivo, pero de eso, a evitar a toda costa que la gente no participe, argumentando ridiculeces, entonces para que son partido político.
Están equivocados de igual manera los promotores morenistas, que al aceptar asistir a votar el 10 de abril por la revocación de mandato, no precisamente se votar a favor a que termine su mandato Andrés Manuel López Obrador .
“Mostrarse asustado sin motivo aparente es dar a conocer que se tiene razón de temer” Seneca
Como todos están asustados con los diablos que traen en la cabeza, los problemas de seguridad pública continúan cobrando víctimas, diariamente, para darnos una idea de la gravedad, en el estado de Quintana Roo desaparece una persona a diario, el centro turístico de mayor importancia del país, esta en crisis de seguridad, pateando el pesebre por la ausencia de justicia, hace que la delincuencia permeé todo rincón del país, incluso con sargazo.
Los asesinatos de jóvenes, robo de transporte público, feminicidios y ahora para rematar, un organismo internacional evidenció al Estado mexicano, por el caso de los jóvenes de Ayotzinapa, descubrieron la participación de las fuerzas armadas en el tiradero de Cocula. El gobierno federal, prepara un informe que ahora sí, es el bueno, para desmentir el informe peñista de la “Verdad histórica” mientras tanto los padres, compañeros y la sociedad entera, espera justicia una verdadera.
Que la Semana Mayor, sea enteramente de paz.
Nos saludamos pronto.