Desde 2010, el fabricante coreano Hankook ha estado trabajando en el desarrollo de llantas que no requieran el uso de aire como soporte y acaba de presentar en el CES 2022 una nueva propuesta cuyo diseño se inspira en la estructura celular, hace parte de su línea i-Flex y es, por ahora, diminuta.
Esta llanta en fase de prototipo se desarrolló a través de estudios y pruebas biomiméticos, por lo que presenta una serie de radios entrelazados de múltiples capas para hacerlo lo suficientemente rígido como para soportar peso, al mismo tiempo flexible para deformarse y asumir con suavidad con los baches de la superficie.
Para hacer eso, Hankook se inspiró en la estructura de las células de los organismos vivos. La estructura de radios roscados que se desarrolló permite que maneje el movimiento en ambas direcciones, no solo hacia adelante.
Esta nueva llanta de Hankook tiene un tamaño de solo 10 pulgadas con un diámetro de 40 centímetros y un ancho de 10,5 centímetros y para demostrar su funcionamiento, la marca ‘calzó’ el módulo de manejo autónomo Plug & Drive de Hyundai.
Hankook afirma que como no requiere ningún mantenimiento estas llantas serán perfectas para flotas y vehículos autónomos y tienen una ventaja de seguridad ya que no hay riesgo de descompresión explosiva si un objeto afilado perfora la capa exterior.
Pero no es la única ventaja, además de Hyundai, General Motors y Michelin también están interesados en las aplicaciones futuras que tendrá esta tecnología.
Hankook tiene una línea de llantas que no requieren aire que se denomina i-Flex y cuyas aplicaciones no han salido al mercado masivo, pero si se han usado en vehículos especiales.
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