Estudio confirma la necesidad de una dosis de refuerzo en Moderna o Pfizer

La pandemia inicia su tercer año peor de lo que se esperaba, nunca antes el SARS-CoV-2 había infectado a tanta gente en tan poco tiempo. Los expertos coinciden en que las olas pandémicas no cesarán en los próximos meses y aunque, la nueva variante ómicron cause menos mortalidad que sus antecesoras-148 muertes este martes, su gran capacidad de contagio eleva la probabilidad de un curso grave de la enfermedad- 137.180 nuevos contagios detectados en el último día.

La comunidad de investigadores lo tiene claro: la tercera dosis de la vacuna será necesaria para hacer frente a la cepa sudafricana. El estudio del Instituto Ragon del Hospital General de Massachusetts (Estados Unidos) ha sido el último en confirmar la necesidad de una dosis de refuerzo de Moderna o Pfizer para proporcionar inmunidad contra la nueva amenaza.

Los resultados de esta investigación - publicada en la revista 'Cell'- prueban que los "regímenes de dosificación tradicionales de las vacunas COVID-19 no producen anticuerpos capaces de reconocer y neutralizar la variante ómicron", según recoge Europapress. Mientras, en España la administración de la dosis de refuerzo crece paulatinamente hasta alcanzar al 30% de la población, muy inferior al 80,3% que cuenta con la pauta completa de acuerdo a los últimos datos oficiales. 

En esta ocasión, para demostrar si las vacunas protegen realmente contra el nuevo linaje, los investigadores construyeron "una versión inofensiva" de ómicron conocida como "pseudovirus".

A continuación, reunieron 239 muestras de sangre de personas, que habían sido vacunadas con alguna de las tres inyecciones, Pfizer, Moderna y Johnson & Johnson, para medir la eficacia con la que cada vacuna alcanza la inmunidad protectora en forma de anticuerpos contra las cepas.

Desafortunadamente, la conclusión del estudio confirmaba lo que ya se sabía. En palabras de su autor principal, Alejandro Balazs: "Detectamos muy poca neutralización del pseudovirus de la variante Ómicron cuando usamos muestras tomadas de personas que fueron vacunadas recientemente con dos dosis de la vacuna de ARNm o una dosis de Johnson & Johnson". La adaptación del virus a los humanos, a partir de 34 mutaciones en su proteína spike que no se encuentran en la cepa original detectada en Wuhan (China), es la principal sospechosa de la rápida propagación de la variante por todo el mundo.

Pero la investigación también albergaba cierta dosis de esperanza, "las personas que recibieron tres dosis de la vacuna de ARNm tuvieron una neutralización muy significativa contra la variante Ómicron", reconocía Balazs. A juicio del coautor de la investigación, García Beltrán, la tercera dosis sirve para crear anticuerpos que se unan, específicamente, a la proteína spike y a su vez, generen anticuerpos que se dirijan a regiones de dicha proteína que son comunes a todas las formas de SARS-CoV-2.

Hace menos de un mes, un estudio preliminar de las compañías Pfizer y BioNTech apuntaba en la misma dirección: la tercera dosis de refuerzo de este compuesto aumentaba los anticuerpos neutralizantes hasta en 25 veces y era eficaz frente a la variante ómicron. Ambas farmacéuticas también anunciaban el desarrollo de una vacuna específica contra la ómicron que se espera para marzo.

Mientras tanto, la campaña de vacunación de la tercera dosis avanza en España y algunas comunidades convocan a los mayores de 50 años a recibir el tercer pinchazo. A través de la décima actualización de la Estrategia de Vacunación frente a la Covid-19 publicada por el Ministerio de Sanidad, los vacunados con pauta completa que se contagien de covid saben que recibirán la dosis de refuerzo a las cuatro semanas. Visto lo visto, es posible que todos los grupos de edad acaben pasando por el mismo trámite...