Arsénico y flúor en agua de San Luis

¿Qué pasa con el agua potosina?

El organismo Operador de Agua Potable, Alcantarillado y Saneamiento (Interapas) suspendió el funcionamiento de 10 pozos en octubre de 2012, y este caudal se sustituyó con agua de la Presa El Realito. La principal razón por la que se dejaron de explotar estos pozos fue porque debido a la sobreexplotación, presentaban una alta y muy alta concentración de minerales como el flúor.

¿Qué es el flúor? Es un mineral natural que se encuentra en la corteza terrestre y tiene una distribución extensa en la naturaleza. Se puede encontrar en algunos alimentos y depósitos de agua.

Agua potosina, con niveles aceptables de flúor

Sin embargo, debido a los problemas que ha presentado el irregular suministro de El Realito, la nueva administración del Interapas decidió rescatar estos 10 pozos que presentan altas concentraciones de flúor.

Rafael Moguel Carrillo, director Operativo de la Comisión Estatal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Coepris), explicó que se han encontrado concentraciones de diversos metales y minerales en el agua y se tiene presencia alta y muy alta de arsénico en los más de 200 pozos que distribuyen agua en el estado.

La realidad es que no se convierten en tóxicas

El funcionario explicó que si bien se tienen altos contenidos de flúor en el agua subterránea de San Luis Potosí, la realidad es que no se convierten en tóxicas o que pudieran llegar a representar un riesgo para el consumo humano, por ello detalló que se están implementando monitoreos y mediciones permanentes por parte de la Coepris así como muestreos de contaminación bacteriológica y fisicoquímica, y aseguró que esta vigilancia confirmó que no hay focos rojos respecto a contenidos de flúor en el agua potosina.

Dijo que luego de analizar los resultados de los muestreos, se determinó que “no son niveles tóxicos los que se registran por lo que el agua se puede consumir; solamente tenemos el detalle de que desde hace varios años se ha venido encontrando el agua así… no hay motivos para entrar en pánico”.

Datos de la OMS contradicen a la Coepris

Sin embargo, según estudios de Organización Mundial de la Salud, los riesgos del flúor y sus derivados son reales.

Esto significa que el flúor puede dañar la salud de forma grave y permanente, causar una pubertad precoz con el consiguiente riesgo de infertilidad, destruir los huesos, y lo que resulta más paradójico, los mismos dientes.

Los riesgos de ingerir flúor en la pasta de dientes incluyen la fluorosis dental, las dolencias estomacales y erupciones cutáneas, además afecta negativamente la función tiroidea, produce deterioro del metabolismo de la glucosa, así como daño cerebral y reducción del coeficiente intelectual.