Según Mireille Acquart, analista y planner de Sostenibilidad Corporativa, además de fundadora y directora general de EFS Consulting Group, las industrias textil y de la moda no se están quedando atrás en la implementación de energías limpias/renovables.
No sólo por las sensibilidades éticas y relacionadas a su impacto ambiental, con emisiones alrededor de 2 mil 100 millones de toneladas de gases de efecto invernadero; sino por el entendimiento de que la aplicación de estrategias de sostenibilidad contribuyen a la eficiencia y a retornos de inversión socioambientales y económicos, señaló la consultora a este medio.
Son las llamadas "energías limpias", una alternativa que además de contribuir a las metas de descarbonización de la industria, representa la alternativa de reducción de costos y mejora de la competitividad, aseguró.
Pero, ¿sabes a qué se le llama una "energía limpia"? "Podríamos identificarla porque proviene de fuentes de energía renovables. La geotérmica, que utiliza el calor interno de nuestro planeta, la eólica, hidroeléctrica y la solar", enumeró la experta señalando una de las características esenciales.
La "energía limpia" se genera a partir de un sistema de producción que excluye la contaminación asociada a gases, residuos, químicos y cualquier otro tipo de emisión que afecte negativamente el ecosistema, aclaró la estudiosa.
Además, no genera emisiones de Gases Efecto Invernadero (GEI), lo cual es benéfico para combatir el cambio climático. Caso contrario a la energía generada con combustibles fósiles o la nuclear, las cuales aportan la mayor cantidad de GEI o gases de efecto invernadero a nivel mundial, mismos que generan grandes riesgos por el manejo de residuos peligrosos.
México tiene grandes retos para combatir el cambio climático, y un medio para lograrlo es la incorporación de energías limpias en la matriz. Por ejemplo, el consumo de electricidad en la industria textil, representa el 40 por ciento en gastos de producción, señaló la también responsable del Programa de Doctorado de la Facultad de Sostenibilidad por la Universidad de Leuphana.
"Por ejemplo, en Alemania, Estados Unidos, Brasil, Canadá, China y España y Filipinas la industria textil se abastece de manera regular con fuentes de energía renovables, como la eólica o la solar para sus operaciones, pero en esta última (Filipinas), por ejemplo, se utiliza energía geotérmica", apuntó la experta.Algunos casos de éxitoRespecto a firmas de moda, una de las marcas globales que hoy utilizan energías renovables no sólo para la fabricación de prendas sino como parte de sus estrategias en puntos de venta es C&A, quien colabora bajo acuerdo con Engie, multinacional francesa que suministra energía de origen 100% renovable en todos sus puntos de venta.
Otro caso de éxito se implementó a partir de Inca Tops, industria de moda que implementó paneles solares ofertando productos de Alpaca. Un caso más, reportado en 2019 por la Cámara Textil ubicada en Puebla, anunció un proceso de migración a energía eólica, con el fin de asegurar ahorros para la industria de un 35 a 50 por ciento, ilustró la asesora de compañías nacionales e internacionales. Otro caso más corresponde a este País y es el de Textiles Brito, que lleva un año en la práctica de confeccionar productos utilizando sólo energía solar.
"En México ya hay conciencia sobre el tema y las marcas saben que los consumidores son muy sensibles con el tema. Por eso están buscando opciones poniendo su granito de arena para llegar a manejar estas 'energías limpias'", finalizó Mireille.A futuroSegún un compromiso internacional ante el Acuerdo de París, así como lo establecido ante la Ley General de Cambio Climático, retomado después por la Ley de Transición Energética. Greenpeace, México, será en 2024 cuando se empiecen a generar mayores y mejores resultados en el País.ConócelaMireille Acquart, analista, especialista y consultora con 14 años de experiencia en el campo, a la generación de herramientas metodológicas y de implementación para dar solución a las problemáticas sistémicas de la cadena de suministro y la de valor de las industrias textil y de la moda.
Ha participado como investigadora, conferencista en 150 talleres y es investigadora de tiempo completo.A destacar"Hasta finales del siglo pasado una empresa podía vivir sin tener sensibilidad por el medio ambiente, aunque cada vez existe mayor presión por parte de la comunidad global para hacer cambios en la producción y consumo. No es posible ya vivir bajo los lineamientos de hace un siglo donde en comunidad se pensaba que los recursos eran infinitos.
"Por fortuna las empresas textiles tienen ahora la capacidad de reducir la energía fósil en las plantas de fabricación, mediante energías limpias o renovables como la energía solar. El uso de energía renovable plantea beneficios sociales. La lucha contra el cambio climático, el ahorro de agua, la reducción de enfermedades provocadas por la contaminación y la reducción de tarifas de agua, luz y gas, son algunos ejemplos".
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