Viernes 26 de Abril de 2024 | San Luis Potosí, S.L.P.

La disputa por el centro historico

Oscar Esquivel | 25/10/2021 | 00:53

Varias generaciones nacimos o nuestros padres nacieron en el centro histórico, nos gusta recorrer sus calles, algunos con nostalgia recordamos aquellos almacenes en la calle Hidalgo, los sábados caminar la calle 16 de Septiembre para llegar a los  los fierreros, acudir a los mercados por queso fresco, comprar lo necesario para las fiesta de diciembre, ir a surtir la receta del doctor con los boticarios, las jarcierias para personas del campo, los almacenes de telas y ropa de la comunidad árabe; El centro era y continua siendo  el eje político, social y económico no solo de la ciudad capital, del estado completo, es el ombligo potosino.

Para realizar esta columna me acerque a un buen número de personas, con el suficiente conocimiento de lo que ocurre en la vida del majestuoso centro, con una diversidad de opiniones, por mas que quisiéramos recopilar las de mayor importancia, todas son importantes, me atrevería  a decir, todos tienen su propio centro en sus mentes, algunos con una vida económica heredada, renunciaron a él desde hace tiempo dándole paso a la “modernidad del mercado”, los productos chinos se apoderaron de todo espacio disponible, hasta de los edificios icónicos sucumbieron a las moda del plástico y el sex shop.

Seguridad, limpieza, vialidad, movilidad, estacionamientos, iluminación, son algunas de las preocupaciones donde todos concuerdan en resolver, el ayuntamiento cuenta con una área de gestión administrativa para la atención de los problemas el centro histórico, el gobierno por otro lado con un aparato burocrático de nombre Consejo Consultivo del Centro Histórico, ni es consejo ni consulta a nadie, bueno hasta hace un mes, donde una sola persona decidía el destino de miles de vecinos del centro, con el tiempo muchos salieron del centro a vivir a otras colonias, los comerciantes  sucumbieron ante atrasos de obras cerraron sus puertas, ya no pudieron recuperarse del todo, aunado al la falta de estacionamientos, los que hay, caros y sin regulación de precios, un minuto lo cobran completo, urge una legislación para ponerlos en cintura.

Existen un sin número de organizaciones civiles, específicamente unidos para beneficio del centro, sin embargo a la hora de desarrollar un plan integral con propuestas sólidas, donde todos obtengan beneficios es ahí donde comienzan las discusiones estériles, iniciando porque no existe una verdadera delimitación de lo que es el centro histórico, los barrios apartados como Tlaxcala,  no obtienen los beneficios como San Miguelito o Tequisquiapan, este último beneficiado con inversiones multimillonarias. 

Los comerciantes ambulantes un dolor de cabeza para los establecidos, pudiera que tengan razón en sus enojos, pero a gritos y sombrerazos no es la vía, ¡fuera! ¡échenlos de aquí! a otro lado donde no sea el centro, a Lomas, Pedregal, es su reclamo, desconociendo o haciendo como que no conocen la problemática social y económica que vivimos; El ambulantaje es un problema mundial que abona a los miseros salarios que se pagan, es ahí es donde debe entrar al arbitraje un conocedor de los problemas socio-políticos, un aperador que sea conciliador, no un mero observador que gestione resolver problemas urbanos, los absurdos, son que solo se pretende mantener la convivencia reparando fachadas, sin escudriñar un poco en lo social y humano. No sé si es una barbaridad, pero ¿las muchachas del eje vial es comercio informal? 

Porque no pensar en sistemas de ayuda para adquirir vivienda digna, si se habla de repoblar el centro, muchos miles de empleados pudieran hacerlo, hace falta guarderías donde el empleador evitaría también la deserción laboral, incluso, con servicio nocturno para aquellos que trabajan de noche y puedan tener la seguridad de un cuidado profesional de los niños. 

La acumulación de los problemas se vincula con una mala comunicación entre los actores, hace que el centro se convierta en una zona con dificultades que pudieran resolverse, es notorio el conocimiento y las propuestas que algunos emiten para el bien común, como el rehacer una central camionera donde lleguen compradores de otros municipios o el estacionamiento de autobuses turísticos, y el centro pudiera caminarse para hacer compras o divertirse.

Es tan grande con casi 3 mil comercios, miles de viviendas algunas habitadas, otras en franca destrucción, lo cierto es que el uso de suelo es variado, el ayuntamiento batalla para cobrar los permisos, predial, agua, por cierto, muy caros. 

Un centro como el nuestro, catalogado como el tercero de mayor importancia en México, por la preservación de edificios y monumentos históricos, debería contar primero con elementos jurídicos y administrativos, que le den cierta autonomía para realizar obras de mantenimiento, como algunos lo mencionaron, conformar la Delegación del Centro Histórico de San Luis Potosí, desafortunadamente quienes “traga más saliva come más pinole” las autoridades hacen preferencias a la hora de actuar, miembros de cámaras de empresariales, poco aportan y solo son figurines de fotografías con los mandatarios, pero quienes viven y sufren los problemas, normalmente sus aportaciones muchas valiosa, solo las pueden compartir en redes sociales, obviamente nunca son vistos por la autoridad.

Han quedado proyectos inconclusos que detonen el turismo en general, la ciudad se publicito para ser vistada como turismo de negocios, olvidado la aportación turística que otorga la ciudad colonial como la que tenemos. La ciudad de los jardines, ahora de los pastizales están olvidados, no existe continuidad para mantenerlos limpios, en el primer cuadro hay pocos baños públicos, ¿Dónde creen que hacen sus necesidades los turistas y alguno que otro pedigüeño? 

Los corredores peatonales lucen oscuros y la cantera sucia, la vida nocturna no “prende” en el turista nacional y extranjero, la inseguridad es un obstáculo para generar mayor dinamismo por las noches, desafortunadamente al turista ya no le genera simpatía para elegir a San Luis como destino turístico, solo lo hacen una vez y ya no regresan. Los museos deben también ser parte de esta dinámica turística, requerimos museos con vida.

El centro histórico es un lugar fascinante, con un gran potencial que se ha desaprovechado a causa de las disputas entre quienes lo viven, tanto tiene derecho el comerciante, como el restaurantero, el bolero, los habitantes de la zona a tener un lugar digno, seguro, que genere bienestar, riqueza.

Con cada potosino que acuda a un café, a una plaza, a un antro, a llevar el mandado de los mercados, estaremos concientizándonos de la importancia que tiene el centro histórico en nuestras vidas. 

Las autoridades nuevas tienen un reto, dejar que las partes involucradas sean unos cuantos y de cuates, convertidos como siempre sucede en voces ausentes, o verdaderamente tendrán la sensibilidad y el talento para involucrar a los usuarios del centro para que a corto y largo plazo mejorar sustancialmente nuestro majestuoso Centro Histórico potosino.

Nos saludamos pronto

OSCAR ESQUIVEL