Jueves 25 de Abril de 2024 | San Luis Potosí, S.L.P.

Los mejores tips para dejar de ser un comprador compulsivo

GQ / Foto: Unsplash | 19/10/2021 | 23:49

¿Eres un comprador compulsivo? Tal vez crees que no lo eres, pero si te pasa que no puedes salir de casa sin comprar algo, siempre encuentras algo en lo que gastas o terminas eligiendo muchas más cosas de las que tenías en mente, entonces tienes este problema, que es mucho más común de lo que aparenta.

 

Ahorrar no es fácil ni cuando ganas un sueldo alto, de hecho, a la mayoría de las personas se les dificulta, se les olvida o creen que no lo necesitan (hasta que ya es demasiado tarde), y el problema es que hay muchos malos hábitos que evitan que tu fondo de ahorros se vaya haciendo más grande con el tiempo, y eso solo va a conseguir que no puedas retirarte a la edad que quieres o tener seguridad y estabilidad económica.

 

¿Te gastaste miles de pesos en compras de Amazon en la pandemia? No fuiste el primero ni el último, y esa es una señal de que caíste en el mal hábito de desperdiciar el dinero y comprar por impulso y no por necesidad.

 

Claro que no está mal que te des un gusto de vez en cuando, pero, si eso de darte gustos ya es algo regular y no puedes imaginar tu vida sin hacerlo, entonces estás saboteando tus propios planes de ahorro (y es posible que, si limpias tu clóset, te topes con muchas cosas que no usas o no recordabas).

 

Para poder ahorrar no solo tienes que pensar en guardar lo que te sobra, sino que tienes que cambiar la forma en la que gastas, y para eso hay una serie de tips que los expertos siempre recomiendan.

 

Planea los gastos extra fuera de tu presupuesto

Es necesario que tengas un presupuesto, esto va a ayudar a que conozcas tus gastos fijos y a que sepas cuánto dinero te queda después de pagar cosas como la luz, el gas, el agua o la colegiatura de tus hijos. Una vez que tengas esto, puedes meter los gastos extra, como unos nuevos tenis o algún gadget, y con tu presupuesto planeado puedes saber si es algo que realmente te puedes permitir.

 

No salgas con tarjetas

Si vas a comprar algo en especial y ya sabes cuánto vas a gastar, una buena forma de evitar gastos extra es llevando efectivo en lugar de tarjetas, ya que no vas a tener la posibilidad de usar crédito o de caer en la tentación de usar tus ahorros o el dinero que tenías planeado para otras cosas.

 

De preferencia, las tarjetas de crédito deben ser solo para gastos fijos o emergencias.

 

Rastrea todos tus gastos

Todos, incluso los que parecen pequeños (que son los que más suman a la larga). Es importante que sepas cómo, dónde, cuándo y en qué te estás gastando el dinero, para que puedas saber cuáles son las áreas en las que puedes reducir y en las que tienes que poner más atención, en especial cuando estás más limitado con tu presupuesto.

 

Evita las tentaciones

Si sabes que no puedes gastar demasiado en una quincena o mes, entonces una buena técnica es evitar esos lugares que te causan más problemas, evita tus tiendas favoritas, los lugares diseñados para hacerte gastar (como los casinos) o esas tiendas que están llenas de aparadores cerca de las cajas para obligarte a comprar algo en el último momento.

 

También debes conocer tus “triggers”, como el estrés u otras cosas que te lleven a gastar en exceso.

 

Compara el valor de algo con el valor de tu trabajo

¿Cuánto tiempo debes trabajar para ganar un solo peso? Una buena forma de ayudarte a ser más controlado medido con los gastos es intentando comparar el precio de un objeto con la cantidad de horas que necesitas trabajar para adquirirlo. Eso pone las cosas en perspectiva y ayuda a que tomes mejores decisiones.

 

Espera una semana

Los expertos recomiendan que no compres todo en el momento en el que lo viste, sino que lo dejes en espera por una semana o 15 días, así puedes pensar bien las cosas para que logres decidir si es algo que necesitas, quieres y vas a usar, o si fue un impulso del momento que realmente no querías.

 

Pide ayuda

Si sabes que tienes un problema, puedes hablar con tu familia, personas de confianza o hasta un terapeuta, esto puede ayudar a que descubras qué es lo que está detonando tus compras impulsivas y a encontrar una mejor forma de lidiar con eso.