Persisten, crisis en el Hospital Central y desabasto de medicamentos

La crisis que enfrenta el Hospital Central “Ignacio Morones Prieto”, y el desabasto de medicamentos que aqueja a los hospitales generales de la entidad son problemas impostergables para los Servicios de Salud del Estado.  

En el arranque de la actual administración  el nuevo edificio del nosocomio más importante del estado y de la región sigue siendo un elefante blanco, ya que sin equipamiento no puede operar, y mientras tanto personal médico que no cuenta con sus prestaciones laborales completas, presta su  servicio en un área limitada en comparación con la demanda de los pacientes. 

Ante  este panorama, la secretaría de Salud no descarta un recorte de personal  y su titular, el Dr. Daniel Acosta advierte: “Que se preocupen los que no trabajan, los que no van a trabajar. Los contratos que sean innecesarios tendrán que prescindirse”, aunque descarta afectar a personal de base. 

DESABASTO 

El secretario de Salud, Daniel Acosta Díaz de León, reconoció que existe un desabasto de medicamentos en los hospitales generales de la entidad y principalmente en el Hospital Central. 

El funcionario estatal explicó que la escasez se debe del atraso en los tiempos de entrega, pero aseguró que se tuvo un acercamiento con el Insabi para poder atender y subsanar esta carencia. 

DERECHOHABIENTES SIN EXPLICACIÓN 

Algunos derechohabientes del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) han denunciado la falta de medicamentos desde hace más de un mes, situación por la cual se han demorado en recibir sus tratamientos principalmente contra diversos tipos de cáncer en hombres y mujeres. 

Sin embargo, las y los pacientes señalan que no han recibido una explicación de las causas que han generado el desabasto del medicamento Leuprorelina que se emplea para distintos padecimientos, por lo que han tenido que comprarlo. 

HOSPITAL CENTRAL EN CRISIS 

El secretario de Salud estatal dijo que el desabasto de medicamentos, la falta de recursos y el cambio a la figura del Insabi, tienen al Hospital Central en estado crítico, añadió que este centro hospitalario tiene “cosas indefinidas desde su origen”, lo que ha generado una crisis. 

Señaló que por tercera vez se está intentando obtener, mediante el proceso con el Insabi, el equipamiento que hace falta para la torre que actualmente está desocupada, lo que requiere una inversión de mil millones de pesos en equipo. 

 “Eso ya se está trabajando. La perspectiva es que para el mes de marzo se pueda tener el equipamiento y se pueda echar a andar ese gran edificio que está inutilizado actualmente”, dijo. 

TRABAJAN CON CARENCIAS Y SIN PRESTACIONES 

Díaz de León reconoció que en el Hospital Dr. Ignacio Morones Prieto actualmente se trabaja en un área muy restringida, con carencias y con una gran demanda de pacientes. Además indicó que el personal médico no cuenta con las prestaciones completas, lo que a su vez genera un boquete en las finanzas del hospital y un adeudo con el Seguro Social y la Secretaría de Hacienda, limitando la operación del centro médico. 

HABRÍA RECORTE DE PERSONAL 

Sobre la posibilidad de llevar a cabo un recorte de personal para ahorrar recursos y mejorar las finanzas del hospital, el titular de Salud dijo: 

“Que se preocupen los que no trabajan, los que no van a trabajar. Los contratos que sean innecesarios tendrán que prescindirse de esos, pero el personal que pertenece al hospital de hace mucho tiempo tiene su lugar seguro, es posible que se entre en una negociación, depende del esquema del Insabi para su nueva operación, pero no se considera ningún despido de personal de base”, dijo. 

UNIRSE AL INSABI ¿ERROR? 

Daniel Acosta dijo que es difícil saber si fue un error que el Hospital Central se uniera al Insabi, sin embargo,  dijo que esperan que el gobierno federal apoye al nosocomio para su operación y que la administración estatal atienda el problema con las prestaciones y salarios de los trabajadores.