El término trombosis, ha causado alerta, pues hace unos días se vinculó al estado de salud de un reconocido actor mexicano. Te contamos más sobre la trombosis, qué daños provoca y cómo detectarla.
Recientemente, se dio a conocer que el actor Juan Pablo Medina, quien ha destacado por su participación en películas y series como La Casa de las Flores, fue hospitalizado en la Ciudad de México por una trombosis venosa profunda.
Su estado de salud fue crítico, aunque trascendió que actualmente se encuentra estable y en recuperación. Sin embargo, el programa De Primera Mano, informó que fuentes cercanas al actor explicaron que fue necesario amputarle una pierna... ¿esta puede ser una consecuencia de la trombosis?
¿Qué es la trombosis venosa profunda?
La trombosis venosa profunda (TVP), ocurre cuando se forma un coágulo sanguíneo en una vena profunda del cuerpo, muchas veces en las piernas o muslos. Permanecer sentado mucho tiempo puede aumentar el riesgo de presentarla, entre otros factores.
Según señala la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos, cuando la vena se inflama por este coágulo, se llama tromboflebitis, sin embargo, también es posible que se desprenda y cause un problema serio en los pulmones, un infarto o derrame cerebral.
De acuerdo a los especialistas, una TVT puede ser resultado de enfermedades que afectan la forma como coagula la sangre, pero también llega a formarse un coágulo si no te mueves durante mucho tiempo, por ejemplo, después de una cirugía, un accidente, si viajas grandes distancias o estás en reposo en cama.
Finalmente, la edad (tener más de 60 años), el embarazo, tomar pastillas anticonceptivas, fumar, padecer insuficiencia cardíaca o cáncer, además de tener antecedentes personales o familiares de trombosis, también se consideran factores de riesgo.
¿Cuáles son las complicaciones de la trombosis?
Uno de los mayores riesgos de la trombosis venosa profunda, es que los coágulos sanguíneos se desprendan y se desplacen a través del torrente sanguíneo, para después atascarse en los pulmones, bloqueando el flujo de sangre, lo cual lleva el nombre de embolia pulmonar. Pero no es el único riesgo.
Especialistas de Mayo Clinic, explican que otra de las complicaciones de una trombosis venosa profunda, es el síndrome posflebítico, pues el daño a las venas por el coágulo sanguíneo, reduce el flujo sanguíneo hacia las zonas afectadas, causando dolor e hinchazón de las piernas, así como decoloración e irritación de la piel.
Por último, los anticoagulantes usados para tratar la trombosis, en ocasiones provocan complicaciones, como una hemorragia, por lo que se recomienda hacerse exámenes de sangre con regularidad.
¿Una trombosis puede provocar amputación?
Cuando existe una reducción del flujo sanguíneo, por ejemplo, por un trombo, ocurre una disminución de la cantidad de oxígeno y nutrientes en la zona, lo cual puede llevar a consecuencias en los tejidos y órganos, entre las más graves, la necrosis.
El sitio especializado Top Doctors España, señala que esta reducción del flujo sanguíneo es llamada isquemia, la cual puede ser provocada por una trombosis.
Si bien en etapas tempranas puede restaurarse el flujo sanguíneo con diferentes procedimientos, como la angioplastia, el bypass arterial o coronario, y la administración de fármacos trombolíticos, en ocasiones es necesaria una amputación por las lesiones isquémicas irreversibles.
¿Cómo detectar una trombosis?
Entre los síntomas clásicos de la trombosis venosa profunda, se encuentran la inflamación, dolor, calor y enrojecimiento de la zona afectada. Sin embargo, en algunas personas no se presentan o pasan desapercibidos, de acuerdo a los National Institutes of Health de Estados Unidos.
Por lo tanto, es importante poner atención a estos y otros síntomas, como:
Hinchazón, en especial cuando es en una sola extremidad
Decoloración de la pierna
Calor y dolor por encima de la vena
Un diagnóstico temprano y el tratamiento pertinente, pueden ayudar a prevenir las complicaciones; acude a tu médico si presentas alguno de estos síntomas.
De igual modo, no ignores señales como dificultad repentina para respirar, dolor en el pecho que empeora al respirar profundo o toser, sentirte aturdida o mareada, pulso acelerado, respiración rápida y tos con sangre, pues podrían indicar una embolia pulmonar.
¿Cuál es el tratamiento para la trombosis?
Al detectar una trombosis venosa profunda, el objetivo es evitar que el coágulo crezca, además de prevenir que se desprenda y viaje a los pulmones. Por lo tanto, existen diferentes opciones de tratamiento.
Entre estos, se encuentran medicamentos como los anticoagulantes o diluyentes de la sangre, que ayudan a que los coágulos no aumenten de tamaño, además de reducir el riesgo de nuevos coágulos.
Otra opción son los trombolíticos, recetados en caos graves de trombosis o embolia pulmonar, para disolver los coágulos. Por otro lado, en quienes no pueden recibir anticoagulantes, se introduce un filtro en la vena cava, para evitar que los coágulos que se liberen lleguen a los pulmones.
Finamente, se recomienda el uso de medias de compresión para prevenir la hinchazón por la trombosis y reducir las probabilidades de que la sangre se acumule y coagule.
Sin duda, al escuchar sobre casos públicos de trombosis, es común sentir miedo y dudas. La buena noticia, es que existen formas de reducir el riesgo, por ejemplo, no estés quieto durante mucho tiempo, intenta moverte y caminar cada cierto tiempo, no fumes, vigila tu peso y realiza actividad física regular.
salud
