Viernes 26 de Abril de 2024 | San Luis Potosí, S.L.P.

El terror ya no importa

Oscar Esquivel | 05/08/2021 | 14:02

De pronto quisiéramos mirar hacia el futuro buscando respuestas adelantadas y nos encontramos que estamos parados en el futuro que en su momento forjamos ayer, es decir, el presente es el futuro de ayer.
Siempre nos creímos invencibles ante cualquier adversidad, nos acostumbramos a que otros hicieran el trabajo por nosotros, en la ciencia, la tecnología, en los avances y transformaciones sociales, el manejo del medio ambiente, y de pronto, la avaricia aparece cuando te vuelves nuevo rico presentándose ante ti, un sin número de oportunidades al mostrarte acaudalado, el poder adquisitivo aumento considerablemente y te creíste Dios.Con los poderes que te da el nuevo y abundante dinero, te dio por buscar el momento de las excentricidades que salieron a relucir y te convertiste en un despiadado depredador por tanto que hiciste nació el bicho llamado coronavirus, que nos ha puesto recargados en el muro del paredón. 
La transformacióneconómica y los avances sociales de China, hicieron que este virus mortal se expandiera por todo el orbe, no parece tener freno, se mueve con mayor naturalidad como si estuviera solo en el mundo, pero encontró en los casi 8 mil millones de humanos, el medio más idóneo de propagase. 
Como una inteligencia alienígena, momentáneamente le pusieron freno vacunando a sectores de la población mayores, pero el virus encontró otro camino, los jóvenes y niños, realizó una mutación, si no más letal si mayormente infecciosa, la variante Delta, ahora responsable de la tercera ola de contagios. 
Los humanos seguimos tan campantes con nuestras vidas, se nos facilita el egoísmo, el individualismo -que muera el otro, yo ya me vacuné- el miedo parece ser una angustia que nos da placer, en lugar de una alerta que nos indique que tenemos que estar preparados ante un inminente peligro.
 El miedo, es un sentimiento extremadamente humano y extremadamente útil, nos permite inclusos valorar el riesgo, no vivimosuna “ida al cine” a ver una película de James Wan director del Conjuro, vivimos auténticas escenas de terror, angustia, tristeza, parece que a muchos les ocasiona placer, retando a la muerteal no vacunarse exponiendo sus vidas como en ruleta rusa, lo más grave, no les importa la vida de los demás. 
El terror será inimaginable cuandoaparezca otra variante del Coronavirus para la que ya no exista vacuna alguna, no podrán evitar al virus, entonces será el momento de ser llamados al casting para ser actores de una nueva película de Guillermo del Toro.
UNA COSA LLEVA A LA OTRA
Medicamentos guardados.
Hablando de salud, en un acto verdaderamente de terror criminal, se dio a conocer que, en los almacenes de la secretaria de salud del gobierno del estado potosino, se “resguardaban celosamente” 423 toneladas de medicamentos para enfermedades crónicas e insumos, estamos ante un crimen de estado contra la población, no justifican porque no se repartieron,la verdad realmente no sabe cómo hacerlo, corrupción con olor a desprecio por las personas que requieren medicamentos, es lo grave. Existen actos administrativos de gobierno donde hay que pensar mal, parece un complot para el gobernador Carreras o para el Gobierno de la República, esta clase de omisiones no son descuidos, nada es casualidad, son actos criminales.
La tercera ola de infecciones en el país se a incrementado exponencialmente, en el estado, algunos todavía no entienden que hay que vacunarse,atendiendo las indicaciones del sector salud. Al estado mexicano le queda una sola opción, acelera la vacunación o estaremos sufriendo las consecuencias catastróficas humanas y económicas, por lo tanto, preferimos el sol y la playa antes de la salud.
 En el estado tenemos 3200 casos activos, con contagios diarios de 540, pasaremos al semáforo naranja desapercibidos y seguramente la próxima semana estaremos en semáforo rojo. Echándolesal a la herida, por una “omisión” de la secretaria de salud del gobierno del estado, 400 médicos y enfermeros, no reciben sueldo desde hace ya un mes, porque a los burócratas potosinos se les “olvido” reportar la lista del personal para pago a la secretaria de Salud federal atreves del INSABI. 
Mucho tendrá que justificar el saliente gobernador, libros en blanco que tendrá que escribir, esperando que el gobierno entrante no lo pase por desapercibido y como siempre solo observaremos la impunidad.
 Le hará falta a Juan Manuel Carreras pasiflora, para acallar los miedos que seguramente le estará causando estos actos de terror, provocados por su gobierno.
 
En manos de quien estamos y estaremos.
En días pasados llegó el límite la lucha interna en el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, se destituyo al magistrado presidente José Luis Vargas # magistrado billetes, acusado de enriquecimiento ilícito por un monto de 36.5 millones de pesos,e internamente por su desempeño como presidente del tribunal. Los magistrados impusieron a otro de igualde dudosa reputación y parcialidad,Reyes Rodríguez. Una crisis constitucional de gran calado evidencio la descomposición del órgano electoral encargado de la impartición de justicia en materia electoral y proteger el electorado de sus derechos.
Sea o no culpable, el procedimiento que destituyo al presidente, la imposición de otro, es urgente la realización de una reforma profunda de los organismos electorales, en este caso y al a concluir este proceso electoral, todos los magistrados deben renunciar al cargo, no solo por dignidad, si no por la inmoralidad como se conducen.
En ellos recayó todas las impugnaciones de las gubernaturas, diputados federales, del proceso tododel pasado 6 de junio, los ciudadanos debemos tener la certeza que contamos con personas de una conducta probada e imparcial.
 Da temor pensar que ellos mismos calificarán las elecciones de seis gubernaturas el año que viene, deben renunciar todos, y la Suprema Corte de Justicia como el Senado actuar rápido, el proceso electoral aún no concluye. 
En manos de quien estuvimos como electores, al convertirse este puñado de seres inquisidoresen la mano que mece la cuna electoral, son como zombis carroñeros, que no se comen entre ellos y velan siempre por sus intereses personales.
Nos saludamos pronto.
OSCAR ESQUIVEL