Pasaron las elecciones en San Luis Potosí y como por arte de magia, la ex candidata de Morena al gobierno del estado, Mónica Rangel se hizo ojo de hormiga y no aparece por ningún lado. Diversos proveedores y ex empleados la señalan de dejarlos embarcados, ya nadie les da la cara y no les pagan los adeudos.
Se habla de fuertes cantidades que se les debe a proveedores de seguridad, logística y hasta de uniformes. Patricia Sainz es una de las afectadas y acusa que se le esconden y ya ni los celulares contestan. Incluso el secretario particular la tiene hasta bloqueada.
Todo se empezó a derrumbar un mes antes de las elecciones, ya que al ver que se venía una debacle electoral, dejaron de pagar y todo el dinero destinado para la campaña ya no fluyó. Se comenta que la ex candidata anda en la Ciudad de México escondiéndose de proveedores y tocando puertas en el gobierno federal para que la acomoden en el INSABI. Si ya no pagó a proveedores ni empleados, ¿Dónde quedó el billete?
EL ESPIONAJE
En tiempos de Enrique Peña Nieto, como primer mandatario del país, se reveló que se estaba espiando a periodistas y opositores. Esto fue mediante el programa israelí Pegassus de venta exclusiva para gobiernos. Ahora se conoce que fueron al menos 15.000 personas quienes fueron espiados. Entre ellos reporteros, activistas de derechos humanos, directores de empresas y hasta el cardiólogo de López Obrador. La inepta Fiscalía General de la República cumplió ya, cuatro largos años investigando sin resultados.
No se nos debe olvidar, que la organización Ciudadanos Observando, fue la primera en denunciar y presentar pruebas que durante la administración de Fernando Toranzo, la Fiscalía del estado de San Luis Potosí adquirió en 2014, tres equipos de espionaje que costaron 73 millones de pesos a la empresa Ingeniería Kantier SA de CV, con sede en la ciudad de México y fue una noticia que prendió los focos a nivel nacional.
Una fuente al interior de la Secretaria de Seguridad Pública del estado, me aseguró en su momento, que uno de estos equipos de espionaje, lo tuvo un buen tiempo I’m alto mando del DIF durante el pasado sexenio.
AFICIÓN ILUSIONADA
A unos días de que inicie el torneo, la afición potosina se siente ilusionada, esperando que ahora sí el Atlético San Luis haga bien la cosas, ya que el campeonato anterior quedó en la última posición y se tuvieron que pagar 120 millones de pesos para no descender.
Con un nuevo entrenador, el uruguayo Marcelo Méndez, el mediocampista también uruguayo Facundo Waller, el arquero argentino Marcelo Barovero y el delantero argentino de origen esloveno Andrés Vombergar, se busca darle un nuevo rostro al equipo y así poder darle alegrías a la tan sufrida afición. El goleador Nicolás Ibáñez dejó un enorme hueco muy difícil de llenar, además de ser uno de los más queridos de la fanaticada potosina.
