La congregación religiosa de los Legionarios de Cristo provocó una especie se marasmo, al atreverse a publicar datos de 27 sacerdotes que abusaron sexualmente de 170 menores, como parte de su proceso de renovación iniciado a raíz del escándalo de su fundador Marcial Maciel. Las victimas en su mayoría varones tenían en su momento entre 11 y 16 años de edad.
El Informe textualmente señala que “recoge las razones por las que se ha tomado la decisión de publicar los casos uno por uno, respetando la legislación correspondiente. Explica el bien que procura para las víctimas, para sus familias, para la congregación, la sociedad en su conjunto y los propios victimarios” y el cual se puede revisar en la siguiente dirección electrónica: https://legionariosdecristo.org/informe-anual-2020-verdad-justicia-sanacion/
Pero volteando a nuestro San Luis Potosí, aquí múltiples víctimas siguen esperando justicia. Pasan y pasan los años y nada se sabe del ex sacerdote Eduardo Córdoba, acusado de pederastia y prófugo de la justicia desde el 25 de junio de 2014, se dice es buscado en 180 países debido a la ficha roja, a través de la Policía Internacional (Interpol) pero sin ningún resultado. Otro caso relevante que la Fiscalía General del Estado tiene en el olvido. Son ya siete años y es evidente que este personaje es protegido por varias cúpulas con mucho poder.
EL ROMPIMIENTO
Donde también se sintió un marasmo fue en los servicios de salud, ya que es más que evidente el rompimiento entre el actual titular Miguel Ángel Lutzow y la ex secretaria Mónica Liliana Rangel.
Se señala que Lutzow intenta hacer una limpia a fondo para deshacerse de los incondicionales de la ahora candidata de Morena y así poder ir colocando sus piezas en puestos claves. Tampoco vaya usted a pensar que el nuevo secretario de salud es una hermanita de la caridad y pretende hacer una limpia de todos los maleficios existentes, para nada, lo que realmente se busca, es nada más cambiar el negocio y el control de manos.
REPROBADOS EN TRANSPARENCIA
En cuanto al tema de la transparencia y la rendición de cuentas, las dependencias estatales, ayuntamientos y no se diga los partidos políticos, están reprobados y empezaron este año muy mal. En este tema van como los cangrejos, dando pasos para atrás en lugar de avanzar. Los rubros que más se están ocultando, son el de los egresos y cuanto realmente ganan los funcionarios y empleados. En el gobierno del estado, ya de plano rayan en el cinismo publicando que los secretarios del gabinete tienen percepciones netas mensuales a penas superiores a los 33 mil pesos. ¡por favor! Vaya que la Cegaip tiene un trabajo colosal para meter en cintura a estos opacos entes.
