El estreno de películas se transformó completamente gracias a la pandemia, y el actual presidente ejecutivo de Disney, Bob Chapek, considera que uno de sus efectos es la reducción permanente de la opción para que las cintas se lancen únicamente en cines.
Antes de la pandemia la mayor parte de los filmes se proyectaban primero en las salas por un promedio de 90 días antes de mudarse a otros canales de distribución, como televisión de paga o plataformas streaming, pero ahora los estudios están jugando con ese período de tiempo, ya sea acotándolo o eliminándolo por completo.
"El consumidor probablemente esté más impaciente que nunca, sobre todo porque durante un año ha tenido el lujo de conseguir títulos en casa", dijo Chapek el lunes por la noche en una conferencia virtual organizada por Morgan Stanley.
"No estoy seguro de que pueda haber un regreso (al método habitual)".
El ejecutivo añadió que los clientes han perdido la tolerancia de tener que esperar meses para que aquellos proyectos que llegaron a los cines estén disponibles en streaming.
"Es como estar sentado ahí, acumulando polvo", indicó.
Dado que la pandemia ha cerrado o reducido la capacidad de las salas de cine, los estudios de Hollywood han reevaluado sus estrategias de estreno.
Paramount y Universal han anunciado planes para reducir la ventana habitual en salas de 74 días a únicamente 45 o 30 y, recientemente, Warner Bros. decidió que transmitirá simultáneamente su lista completa de películas de 2021 en HBO Max un mes después de su estreno en cines.
Disney, que controla poco más de la mitad de la taquilla mundial, ha adoptado un enfoque cauteloso, evaluando la estrategia de estreno de cada película y su eventual debut en su plataforma, Disney+.
Chapek considera que un camino intermedio, el "Premier Access", o el despliegue simultáneo de transmisión y salas de cine, seguiría siendo una opción de distribución en el futuro previsible.
Por ejemplo, el largometraje animado Raya y el Último Dragón tendrá su estreno a través de este método el próximo viernes, con un costo de 329 pesos para los suscriptores de Disney+ en México.
El responsable de Disney subrayó la importancia del atractivo masivo de taquilla de la productora, y señaló que en 2019 recaudó 11 mil millones de dólares.
Desde su lanzamiento en noviembre de 2019 Disney+ ha registrado casi 100 millones de suscriptores en diversos países; Chapek recalcó que el hecho de que el 50 por ciento de su clientela en todo el mundo no tenga hijos fue un factor clave e inesperado.
"De lo que no nos dimos cuenta fue del atractivo no familiar que tendría un servicio como Disney+. Esa es la gran diferencia", comentó.