Sábado 20 de Abril de 2024 | San Luis Potosí, S.L.P.

Ellas son las mejores narradoras de la literatura mexicana

Donde ir / Foto: Unsplash | 02/03/2021 | 00:09

Escritoras que retratan la visión femenina sobre el erotismo, el amor, la guerra, la muerte y la locura: estas son las 8 mejores narradoras de la literatura mexicana que debes leer. En el marco del Día de la Mujer, qué mejor manera de conmemorar esta fecha leyendo a estas grandes exponentes de nuestra literatura y su exploración del sentir femenino. Estas son las ocho mejores narradoras de la literatura mexicana:

 

1) Inés Arredondo (1928-1989)

Inés Arredondo fue una narradora impecable, capaz de transmitir al lector una serie de sensaciones que van desde el erotismo hasta la locura y lo siniestro. Perteneciente a la Generación de Medio Siglo, exploró temas como la identidad femenina y técnicas como el final abierto para dejar al lector el trabajo de interpretación.

 

Con más de una treintena de cuentos, recomendamos La Sunamita (1967) que narra la historia de una mujer atrapada en las garras de un perverso tío y de la sociedad que buscan forzar sus decisiones, lo que traerá a su vida culpas y sufrimiento.

 

Como no hay mejor forma de honrar a esta narradora que leyendo su obra, sugerimos el Material de Lectura UNAM de Inés Arredondo para seguir explorando sus cuentos.

 

2) Nellie Campobello (1900-1986)

Nellie Campobello es un referente fundamental para conocer la visión femenina de la Revolución Mexicana. Con una sutileza y capacidad narrativa distintiva, en su obra Cartucho (1931), los personajes infantiles intentan dar una explicación a los actos de violencia y reivindicación social que llegaron a distintos poblados en Chihuahua.

 

En estos episodios de la Revolución se cuenta una historia plagada de personajes de la vida cotidiana: mujeres valientes y defensoras de su hogar y sus hijos; villistas jóvenes, idealistas y vulnerables; y, la visión de la mirada infantil ante la tragedia.

 

Para escuchar algunos de sus cuentos consulta el Canal INEHRM y disfruta de las narraciones de esta imponente escritora.

 

3) Ana Clavel (1961)

Ana Clavel es la maestra del erotismo contemporáneo. En la exploración del sentir y cuerpo femeninos, Clavel explora diversos ángulos de la sexualidad como el deseo, el vínculo entre inocencia y perversión, las relaciones cotidianas y su ruptura mediante las más retorcidas fantasías.

 

En la novela El amor es hambre (2015) la protagonista Artemisa descubre desde temprana edad los misterios del amor y la sexualidad; lo cual será fundamental para su carrera como chef. En un texto memorable que liga los dos grandes placeres humanos: la comida y el sexo.

 

Para saber más sobre su obra visita la página oficial de esta gran autora mexicana: Ana Clavel

 

4) Guadalupe Dueñas (1910-2002)

Guadalupe Dueñas fue una reconocida narradora y ensayista. Es una clara exponente de la literatura fantástica, extraña y de terror mexicana. Su biografía y su obra confluyen: agregando a su experiencia cotidiana en provincia relaboraciones de visiones y sueños.

 

Recomendamos la lectura del cuento “Mariquita” de la antología Tiene la noche un árbol (1958), que narra la historia de una niña que acaba aceptando como hecho cotidiano convivir con el cuerpo embalsamado de una de sus hermanas fallecida al nacer; así explora la visión femenina desde diferentes ángulos, al tocar temas como el matrimonio, la maternidad y los miedos más recónditos de cualquier mujer.

 

5) Elena Garro (1916-1998)

Elena Garro debe ser considerada como piedra angular de la literatura latinoamericana al ser clara precursora del realismo mágico asociado comúnmente a Gabriel García Márquez. Y es que Garro conjunta los acontecimientos en apariencia fantásticos, pero que para la visión mexicana forman parte de la cotidianidad como algunas leyendas.

 

Recomendamos la lectura de su novela Los recuerdos del porvenir (1963) que narra los conflictos de la Guerra Cristera en Ixtepec. Los hermanos Moncada son los protagonistas de episodios que narran la opresión militar, el costumbrismo provinciano y los amores prohibidos.

 

Para saber más sobre su biografía y escuchar algunos de sus cuentos recomendamos el Micrositio Elena Garro del IMER.

 

6) Margo Glantz (1930)

Margo Glantz es una escritora e intelectual destacada y transgresora. Sus padres huían del nazismo y por casualidad llegaron a México, donde nació esta extraordinaria teórica literaria, ensayista, especialista en poesía barroca y aguda crítica de la posmodernidad.

 

En su obra Las genealogías (1981) realiza un recorrido sobre su historia personal y familiar, y la implicación que esta ha tenido en su forma de ver y percibir la realidad que la rodea. Haciendo a su vez que las lectoras se replanteen su propia historia y reflexionen sobre sus implicaciones.

 

Para conocer más sobre las obras de esta insigne académica visita el sitio de Cervantes Virtual dedicado a Margo Glantz.

 

7) María Luisa Mendoza (1930-2018)

María Luisa “La China” Mendoza fue una escritora, periodista y figura de la difusión cultural en México. María Luisa fue una gran luchadora por la equidad y crítica de la falta de oportunidades para las escritoras de ser publicadas y leídas de la misma forma que los hombres en el gremio intelectual.

 

En su novela De ausencia (1974) narra la vida desenfadada, placentera y extravagante de Ausencia Bautista Lumbres una millonaria y hermosa mujer que representa la liberación femenina encarnada. Mediante una prosa rica, compleja, pero muy divertida.

 

Una buena síntesis sobre su obra narrativa se encuentra en el Capítulo 3 de Vindictas por TV UNAM.

 

8) Cristina Rivera Garza (1964)

Cristina Rivera Garza es una gran exponente de la literatura contemporánea. Socióloga de profesional por la FES Acatlán, es una gran crítica de la lectura y de las formas actuales en las que los lectores se relacionan con los textos mediante los medios tecnológicos. Además del nexo de las artes con las enfermedades mentales.

 

Su obra La Castañeda. Narrativas dolientes desde el Manicomio General de México 1910-1930 (2020)describe desde diferentes perspectivas, principalmente del paciente hasta el médico y el enfermero, las difíciles condiciones y tratamientos de la enfermedad mental. Un tema que también aborda desde la ficción en su novela Nadie me verá llorar (1999). En ambos plantea una crítica al sistema de salud mexicano desde la narrativa, la historia y la crónica como una reflexión de la actualidad.