ENCUESTAS Y REALIDADES

Transformar, modificar, cambiar es tan complejo que en ocasiones es mejor construir desde los cimientos. Una casa vieja cuando se restaura y tiene un valor histórico o arquitectónico, es de lo más costoso que se pudiera imaginar, tanto detalle, humedades, instalaciones viejas, que muestran el deterioro, pero aun así, vale le pena rescatarlas por su valor artístico y cultural. No obstante, existen otras que fueron construidas con buenos cimientos, modernas, funcionales, pero sus habitantes encargados de su buen funcionamiento con mantenimiento, de tener una casa limpia, segura, se confiaron permitiendo a quienes la habitan, desmantelar, vender, y hasta robar sus propios bienes, en poco tiempo, lo construido se encontró en deplorables condiciones. Cosas y rincones se podían rescatar, tal vez por su propio valor o aquel que le da la familia. Como se construyó fuerte, tardaron 30 años antes de convertirla en solo un cascaron de piedra.

Así la cuarta transformación tan esperada, anuncio y se comprometió a erradicar la dejadez, la corrupción, el desamparo, topándose con algo que ya conocía y encontró,la falta de “mantenimiento de las instituciones” lo construido en el pasadolo dejaron un desastre. Había dos opciones, una remodelar lo viejo o construir de cero una nueva nación, y la 4T opto por lo segundo, demoler sin corta pisas, no sería un cambio de gobierno solamente, sería un cambio de régimen, donde el presidencialismo surgió nuevamente como ente controlador del todo para poder realizarlo.

Como un rompecabezas o un juego de armar de legos, puestos encima de una mesa endeble, se echó para abajo todo. En la teoría pareciera buen acierto, solo que ahora o se han tardado mucho en volver a construir, o no saben dónde quedaron las piezas más importantes de los cimientos. Como en todo, el presidente dispone, ordena, los de debajo su equipo con mayor cercanía, no van al mismo ritmo de la idea o de plano, desconocen cómo construir una nueva república.

Lamentablemente el desdén hacia el contario es sin duda una característica peculiar del presidente López Obrador, no es venganza, esgrime, entonces sería la prisa por dar un golpe de timón a las políticas pasadas. En este primer tercio de gobierno ¿Serían dos años de gobierno de la 4 T o dos años de la ruptura con el neoliberalismo, el combate a la corrupción y la impunidad? Preguntas tan ambiguas y difícil de contestar,en razón que la 4T en este tiempo en el gobierno no ha sabido establecer claramente una postura definida de gobernanza, ya en muchas ocasiones han demostrado tener conductas conservadoras, como el manejo de la macroeconomía y la forma como se asigna la obra pública.

Con sorpresa, el pasado 1 de diciembre, medios de comunicación nacionales y encuestadoras daban parte de la popularidad con la que goza el presidente, como diez firmas prestigiosas en el ámbito demoscópico, coincidían en el porcentaje de 61% de aceptación la gestión presidencial de AMLO, el 35% lo desaprueban. Es de observarse que en todos los demás rubros de las encuestas, en preguntas de economía, bienestar, seguridad y manejo de la pandemia, el resultado tenia variaciones mínimas, pero siempre arrojando el mismo resultado 60-35. De este tamaño es la polarización de la población, detenida en porcentajes.Ambos lados requerirán hacer algo extraordinario para hacer que la abalanza se cargue a un lado ¿de quién será el amor de los ciudadanos?

Sí, por México, la plataforma empresarial para hacerle frente al López Obrador y toda su cuarta transformación, liderados por un par de personajes salidos de las sombras más obscuras de la corrupción, el empresario Claudio X González y un tal Gustavo de Hoyos, presidente de Coparmex  aprendiz de política y aliado incondicional del ahora partido conservador PRI, va como caballos enfurecidos por el fuego en la batalla final.

Estos señoritos tienen su mérito, este par de simuladores, logro reunir al PRI,PAN y PRD en una mesa, con la mano derecha mostraron lo que ellos creen seria el modelo idóneo de nación y con la izquierda un costal y un garrote; el costal para recuperar el dinero que perdieron en las pasadas elecciones del 2018, y el garrote para hacer valer su gorilismo fascista en caso de no acceder a sus aspiraciones de mantener sus privilegios. Robar, tranzar y mejorar la vida de los pobres… ¡No! ¡De ellos!¡La cúpula empresarial y política! El pueblo, los militantes, la gente salen sobrando.

Lo extraño con tanto poder económico, pudiendo contratar a los mejores expertos en consultoría política, los tres partidos políticos no se han dado cuenta que tendrán un efecto bumerán, con su coalición o alianza. Poniendo como ejemplo local, en nuestra tierra potosina, el PRI en las pasadas elecciones fue un magnifico aliado del PAN en la capital, toda su empatía con el entonces candidato Xavier Nava…ojo trabajo de Carreras, que a su vez no era panista sino simpatizante. Entonces existió una alianza no escrita que a la fecha continúa, antes de que Xavier Nava, fuera precandidato ya todo el aparato gubernamental carrerista estaba trabajando, tratando de convencer al priismo. Sin querer faltar a la verdad, casi por descarte la alianza PRI-PAN se hizo con la finalidad de apoyar a Nava. Los otros tres panistas se quedaran chiflando en la loma

El silencio priista es de vergüenza, los propios precandidatos esperando línea dan pena ajena, la cúpula del Revolucionario Institucional los responsables de la hecatombe 2018, con poca operación en los municipios, dejaron en la orfandad de participación a cientos de precandidatos, que buscaron refugio en otros partidos, enfrentados entre el priismos internamente y sus antiguos y acérrimos contrincantes de otros partidos… pueblo chico, infierno grande.

 Me cuesta trabajo decir esto por su corte NAZI pero Movimiento Ciudadano y Morena serán ahora la casa de refugio para muchos panistas y priistas que la alianza no les convence, los dos partidos están frotándose las manos. El corrupto Verde recogerá sin duda los frutos de la campaña anticipada de Gallardo, veremos el mapa de los municipios con autoridades, pintados de verde, guinda y naranja.

Como se dice en el argot popular “la gente ya no se chupa el dedo”. Primero se reafirma la complicidad PRIAN con empresarios corrutos del pasado, segundo se han dado cuenta de que la alianza es producto para conservar a la elite en su cargos públicos, sin importar sus militantes, por último, el juego de poder público no debe caer en manos de simplistas busca chambas amen de la desaparición del conservadurismo priananista, Adiós a la social democracia.

Nos saludamos pronto.