La expectativa de integrar un gran frente opositor encabezado por el PAN y el PRI rumbo a la gubernatura de Nuevo León duró apenas 48 horas.
Después de intensas negociaciones y de que el dirigente nacional priista, Alejandro Moreno, se trasladó de urgencia a Monterrey desde el martes para intentar amarrar una coalición, finalmente ayer el PAN sepultó cualquier proyecto en ese sentido.
En cambio, al vencer hoy a las 23:59 horas el plazo para registrar coaliciones, el albiazul va a registrar la suya con el PRD y buscará candidatos ciudadanos para los distintos cargos, incluyendo la gubernatura.
El último intento de acuerdo entre panistas y priistas ocurrió el miércoles en la residencia de Mauricio Fernández, en San Pedro.
Además de Fernández y Moreno, en ese encuentro estuvieron Mauro Guerra, dirigente estatal albiazul, y Francisco Cienfuegos, diputado local priista.
No acudieron Zeferino Salgado, Raúl Gracia ni Víctor Pérez, principales dirigentes de Acción Nacional.
Fuentes allegadas a la reunión aseguraron que el acuerdo perfilado consistía en dejar al PAN las candidaturas a la gubernatura y a la alcaldía de Guadalupe, y al PRI la candidatura a la alcaldía de Monterrey.
Para concretar la negociación, Adrián de la Garza, alcalde de Monterrey, habría estado de acuerdo en sacrificar sus aspiraciones por la gubernatura.
Aunque en la reunión no se acordó ningún nombre específico, fueron mencionados entre los prospectos al Gobierno de Nuevo León los panistas Carlos de la Fuente, diputado local, y Homero Niño de Rivera, ex diputado federal y ex Secretario del Ayuntamiento de San Pedro.
Más temprano ese mismo día, Moreno se reunió con empresarios del Grupo de los 10, también con miras a la coalición con el PAN y el PRD.
Todavía ayer, poco después del mediodía, tras encontrarse en privado con aspirantes de su partido, legisladores y representantes de sectores, el líder nacional priista se mostró optimista, al señalar que la coalición avanzaba y sólo faltaba ponerse de acuerdo sobre los perfiles idóneos.
Sin embargo, a partir de las 15:00 horas empezaron a correr versiones de que el PAN no suscribiría alianza alguna con los tricolores.
A las 19:30 horas, el propio dirigente estatal panista descartó cualquier arreglo.
Según Guerra, no se lograron acuerdos sobre los perfiles de los posibles candidatos, aunque también hubo versiones de que tuvo peso el rechazo de muchos panistas a unirse a un partido que consideran opuesto en principios y valores.
"Hubo diálogo con todas las fuerza políticas, y al final no encontramos las condiciones o lo que estábamos buscando como un proyecto que garantizara darle a Nuevo León el mejor candidato", dijo Guerra.
Y mientras el panista oficializaba el fin de las negociaciones, la Comisión Permanente del Consejo Político del PRI autorizó a su dirigente estatal, Heriberto Treviño, integrar un convenio de coalición para 2021, sin mencionar partidos.
En un comunicado emitido anoche y sin mencionar al PAN, el PRI estatal señaló estar abierto a propuestas de diferentes partidos y organizaciones civiles para una alianza.
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