Con la reforma a la Ley de Fomento para la Lectura y el Libro aprobada por unanimidad en el Senado de la República, se amplió la vigencia del precio único de 18 a 36 meses.
La reforma, avalada por unanimidad de 104 votos e impulsada por la morenista Susana Harp, plantea además que el libro electrónico tenga un tratamiento semejante al del impreso.
El precio único de venta al público tendrá una vigencia de 36 meses contados a partir de la fecha de impresión o, en su caso, del pedimento de importación.
Sin embargo, el precio único no es fijo por 36 meses.
"El editor podrá convenir la modificación del mismo conforme a la conveniencia del mercado o su distribución, sin embargo, cualquier cambio deberá realizarse de manera homogénea en el territorio nacional", se plantea en el dictamen aprobado.
Se designa a la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) como la autoridad responsable del cumplimiento de la ley.
Los editores registrarán el precio único de los libros editados en el País o importados al territorio nacional en una base de datos pública que habilitará la Secretaría de Cultura (SC).
También se establece un plazo máximo de 90 días a partir de la entrada en vigor del decreto para que la SC habilite esa base de datos.
El decreto entrará en vigor al día siguiente de su publicación en el Diario Oficial de la Federación.
nacionales
