San Luis Potosí, SLP.- La profesionalización y certificación de los elementos policiales se ve frenada por tres vertientes: la falta de conocimiento del estado actual de los elementos, la politización al tema de la seguridad y la falta de transparencia en el uso de los recursos provenientes del subsidio para el Fortalecimiento del desempeño en materia de Seguridad Pública (Fortaseg), señaló Luis Alberto Osornio Saldivar, coordinador de la carrera en Criminalística de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí (UASLP).
Desde la cabeza de la Secretaría de Seguridad Pública del Estado (SSPE), se ha reconocido que 56 elementos policiacos no pasaron los exámenes de control y confianza, siguen trabajando en la dependencia, en tanto no culmine el proceso de la baja. Además, también se reconoció que hay 728 policías que pasaron de ser operativos a administrativos.
Hay una serie de factores que mantienen estancados a los policías en su formación en San Luis Potosí, además de poco aprovechamiento en sus habilidades, es el desconocimiento del estado actual de las policías, es uno de los principales.
“Se tiene que tener un sistema integrador que nos dé una visualización de indicadores de quienes son los elementos a pie, cuantos tenemos en administración y que realmente los tengamos ubicados, con sus capacidades físicas (edad, enfermedades crónico degenerativas, discapacidad), tener una base de datos muy actualizada, un elemento informativo, una base bien encuadrada, sino la tenemos bien integrada y que realmente estén todos los municipios, habrá pocos avances”.
Otro de los elementos que impiden avanzar a las corporaciones, es la politización de la capacitación policial y la negativa de continuar con los avances que ya se habían tenido en otras administraciones estatales: “El problema es que esa debe de ser una cuestión de estado y en esa discusión política, en las cuales se pierden las administraciones, los únicos que salen perdiendo son los ciudadanos y la academia”.
Lamentablemente la seguridad se politiza y los avances que se dieron en una administración, “llega otra administración y hay un retroceso, nunca hay una cuestión que sea un eje fundamental”, Osornio Saldivar apuntó que se necesita que la capacitación policial tenga una estructura inamovible que no sea cuestión de colores partidistas, sino cuestión de estado.
El tercer elemento que frena el desarrollo profesional de los elementos, es la falta de transparencia de la utilización de recursos del Fortaseg, criticó: “A veces hay fondos enormes, pero no se aplican y se tienen que regresar, porque no se pudo integrar un proyecto, los proyectos se bajan, se hacen, se llevan a cabo y se justifican, sino se llevan a cabo los proyectos, el gobierno municipal o estatal no puede ejercerlos, entonces ¿Qué hace el Gobierno Federal? Toma ese dinero y les dice “como no lo aprovechaste, no presentaste proyectos, no lo justificaste, no hay evidencias, yo tengo que hacer una replanificación del dinero”.
En resumen, el primer entorpecimiento es no tener una base de datos, una integración estructural para saber con qué elementos se cuenta, el otro obstáculo es que no hay una visión de Estados, ocasionando que haya retrocesos en la capacitación y carrera policial y el tercero, es que no hay proyectos específicos, ni transparencia en el uso del recurso proveniente del Fortaseg.
Para formar un mando policiaco, un mando medio o alto, tienen que pasar un proceso de 15 años: “Para que usted tenga un mando con capacidades policiales, mando medio o superior, usted tiene que tener una formación, de instrucción de 15 años, estamos hablando de una persona que ya entiende los mapas político criminal, que sabe de estrategias, que saben investigación, que coordinan todas las zonas y los polígonos, que son gente que tiene los mandos más altos y entienden bien la estratificación y aparte que han ido madurando en el sistema”, además de que su conducción ética y profesional ha sido buena, explicó.