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Seis mejores prácticas para garantizar el éxito de un sistema de nube híbrida

EFE | 13/11/2020 | 22:44

Los servicios en la nube híbrida son frecuentes entre muchos departamentos de TI, pues los CIO han digitalizado múltiples aplicaciones, infraestructura y herramientas mientras mantienen otras de forma física. Sin embargo, esto puede causar ineficiencias y retrasos derivados de la complejidad y variedad de proveedores de servicios de TI híbridos disponibles en el mercado. Pat Phelan, vicepresidente de investigación de mercado de Rimini Street, firma de software empresarial, compartió para el equipo de NotiPress seis mejores prácticas para administrar exitosamente un entorno digital.

 

En primer lugar, el personal debe poseer las nuevas habilidades necesarias para implementar y operar un entorno de TI híbrido, aunque son difíciles de encontrar. Cuanto menos, es necesario un arquitecto de nube senior, con habilidades técnicas en ingeniería entre silos, seguridad en la nube e integración de plataformas, asegura el Centro de excelencia en la nube (CCOE) de Gartner.

 

Por otro lado, tener varios proveedores en la cartera híbrida crea la posibilidad de que diferentes SLA (Acuerdos de nivel de servicio) entren en conflicto, o al menos resulten incompatibles. Por ello, es importante unificar los servicios en la nube y fuera de ella con un socio de soporte capaz de organizar los servicios y la gobernanza entre proveedores.

 

Como tercer punto, los líderes de TI debe considerar estratégicamente las capacidades comerciales susceptibles de beneficiarse por operar en la nube frente a las que deben permanecer en físico. Por su complejidad y manejo de datos sensibles, herramientas de gestión interna y ERPs (planificación de recursos empresariales) son poco viables para funcionar en la nube en la forma de SaaS (Software como servicio). Caso contrario, herramientas de atención y experiencia del cliente se benefician de la constancia, flexibilidad e independencia de los sistemas internos que goza el software en la nube.

 

Dado un determinado tiempo en el crecimiento de la cartera de aplicaciones en la nube, será necesario implementar soluciones de integración especializadas para evitar incompatibilidades. Es recomendable agregar al entorno digital de la empresa soluciones como una herramienta iPaaS (Integración de plataformas como servicio) para abordar los diferentes requisitos entre aplicaciones de nube a nube y de nube a no nube.

 

Relacionado con el punto anterior, se debe priorizar una integración limpia y eficiente conforme aumentan los proveedores de TI. La complejidad arquitectónica puede dificultar sustancialmente estrategias de importancia como la seguridad. Es importante relegar a la nube solo aquellos componentes no sujetos a actualizaciones frecuentes que limiten su integración con los demás. Además, asegurar que el diseño de arquitectura de TI híbrida sea lo suficientemente flexible como para incorporar o eliminar soluciones rápidamente.

 

Finalmente, los procesos de seguridad deben ser sólidos para evitar ciberataques que comprometan la integridad del sistema y los datos privados. Una encuesta reciente del banco de inversión Cowen demostró, el 37% de los encuestados identificó la seguridad en la nube como una prioridad de inversión. Aunado a esto, 90% de los encuestados esperaban aumentar los presupuestos de seguridad en 2020 antes de la pandemia de Covid-19.

 

Al respecto, Rimini Street recomienda definir con claridad los propietarios de cada componente de la infraestructura y los servicios de seguridad de aplicaciones, especialmente el control de acceso e identidad. También es clave realizar auditorías de seguridad de forma regular, y garantizar una adecuada vigilancia por parte del equipo de TI.

 

De acuerdo con Phelan, los beneficios de un entorno de TI híbrido en la nube son importantes, aunque es clave abordar proactivamente lo planteado en estas seis prácticas. Los CIO deben repensar cómo operar la TI en la nube híbrida y desarrollar un plan de negocios que tome en cuenta los desafíos de la digitalización.