Ha faltado voluntad para reubicar los hornos
Desde hace 15 años, la zona metropolitana de San Luis Potosí ha padecido el problema de la contaminación que generan las ladrilleras artesanales. Durante este lapso de tiempo han pasado administraciones municipales y estatales que no han podido resolver esta problemática, lo cual ha dejado de manifiesto la falta de voluntad política. Las actuales administraciones prometieron reubicar las ladrilleras pero la realidad es que no existe ningún proyecto.
Gobierno municipal no tiene facultades
En una solicitud de información realizada al Ayuntamiento de la Capital sobre la existencia de un proyecto de reubicación de ladrilleras, la dirección de Ecología y Aseo Público respondió que no cuenta con el proyecto para la reubicación de ladrilleras en la zona metropolitana de San Luis Potosí, porque el Ayuntamiento no tiene facultades ni atribuciones para regular las emisiones a la atmósfera ocasionadas por los hornos ladrilleros.
En la respuesta destaca que dicha competencia le corresponde únicamente a la Secretaría de Ecología y Gestión Ambiental (Segam), que es la autoridad encargada de emitir y regular los permisos para operación de fuentes fijas, de acuerdo al artículo 7 de la Ley General de Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente, además de diversos artículos de la Ley Ambiental del Estado.
Segam, sin ningún proyecto
Mediante solicitud de información también se cuestionó a la Segam sobre el proyecto de reubicación; la Unidad de Transparencia de esa dependencia estatal respondió que tras una búsqueda exhaustiva y minuciosa en los archivos de la Dirección de Planeación y Política Ambiental, en el periodo comprendido del 19 de marzo de 2019 al 9 de abril de 2020, no cuenta con un proyecto para la reubicación de ladrilleras en la zona metropolitana de San Luis Potosí, en virtud de que no se ha planteado ningún proyecto.
Faltó planeación
De acuerdo al diagnóstico socioambiental sobre ladrilleras realizado por el Colegio de San Luis, aunque la problemática no es nueva, ésta se pudo permitir con una buena planeación de la zona metropolitana y Soledad de Graciano Sánchez, pero debido a la falta de planeación y aplicación de un buen Plan de Desarrollo Poblacional, cientos de ladrilleras han quedado en medio de zonas urbanas que se caracterizan por su marginalidad y altos niveles de contaminación.