San Luis Potosí, SLP.- Además de la red de empresas fantasma, destapadas por la investigación “Pandemia de corrupción de los Servicios de Salud de San Luis Potosí”, también se descubrió que había competidores fantasma que se beneficiaron de las licitaciones que siempre ganaba Gabriel Salazar, dueño de las empresas inexistentes, señaló Lupillo González Covarrubias, vocero de Ciudadanos Observando A.C.
Es decir, Salazar siempre concursó contra personas que ni siquiera sabían que estaban compitiendo por ganar las licitaciones de compras en los Servicios de Salud.
“La secretaria de Salud (Mónica Liliana Rangel Martínez) en su momento dijo que todos los procesos de compra eran transparentes, que habían sido auditados, vamos a ver si es cierto eso, resulta que los competidores, para que ganara los millones de pesos, este señor y sus empresas, había competidores fantasma, no nada más ganaban las empresas fantasma, había competidores fantasmas”.
González Covarrubias, declaró que Salazar tenía “tanto poder” en la Secretaría de Salud, que entregaba los expedientes de él y sus dos competidores: “Solamente que él también llevaba las carpetas y entregaba los documentos”.
Una persona que aparece compitiendo contra Gabriel y sus empresas por millones de pesos, fue Claudia Lucía Pérez Rodríguez, quien por medio de una entrevista con la asociación civil, dijo que jamás había participado en ninguna licitación.
Sin embargo, su nombre fue utilizado y firma también, por tanto, González dijo que se incurrió en otro delito: robo de identidad, pues al menos hubo 10 testimonios similares.
Eduardo Lárraga Martínez, también negó mediante una entrevista con Ciudadanos Observando: “Como alguien se atrevió a hacer eso, dijo: “jamás he participado yo en ninguna licitación, ni ninguna invitación restringida, no conozco a nadie de la Secretaría de Salud”.
Asimismo, se detectó que las compras estaban amparadas en pólizas de fianza, las cuales están falsificadas: “Quien validaba toda esta asquerosidad en la Secretaría de Salud, era la propia Contraloría Interna, estaba una funcionaria que daba fe como testigo”, concluyó Lupillo González.
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