San Luis Potosí, S.L.P. .- La secretaria de Salud, Mónica Liliana Rangel, reconoció que hay casos de trabajadores de la Zona Industrial contagiados de COVID-19, pero negó que se trate de un brote, porque estas personas han contraído el virus en el exterior de las empresas.
Aclaró que en caso de confirmarse un brote, se procedería a la suspensión de actividades, ya sea de una línea de producción o incluso el cierre total de una empresa.
Por su parte, el secretario de Desarrollo Económico, Gustavo Puente Orozco, explicó que hasta el momento las empresas que reanudaron sus labores desde el 1 de junio dentro de la Nueva Normalidad, están operando al 40 o 50 por ciento del total de su plantilla laboral.
En el caso de las armadoras automotrices, BMW y GM, están incorporando al total de su plantilla laboral, atendiendo a su demanda, empresas que han sido totalmente responsables, donde incluso algunas han optado por aplicar pruebas serológicas a su personal, como parte de sus protocolos y medidas sanitarias para prevenir un contagio del virus.
Cabe señalar que son alrededor de 90 mil trabajadores los que se han reintegrado a laborar y faltan alrededor a 35 mil más en la Zona Industrial y parques industriales privados de San Luis Potosí