México atraviesa por una de las peores crisisen materia de salud y económica,cuya afectación ha impactado directamente en la economía de las familias, según cifrasoficiales recientes del Instituto Nacional de Estadística y Geografía(INEGI), reveló que la crisis del coronavirus dejó sin ingresos a casi 24 millones de trabajadores (formales e informales), precisando que 11.3 se quedaron sin dinero y sin trabajo temporal.Por su parte, el Consejo nacional de evaluación de la política de desarrollo social (CONEVAL)pronosticó un incremento de la pobreza entre un 6.1 y 10.7 millones de personas, mismas que se sumaran a los 52.4 millones de personas que se encontraban en situación de pobreza hasta 2018. Frente a este panorama desolador, se suma el entorno de polarización socialen que vivimos, el cual hafomentadola división entre los ciudadanos,la trivialidad con que se discuten las ideas no permite lograr planteamientos al nivel requerido,el debate político está más orientado a la crítica del pasado que a la formulación de propuestas viables.
Por su parte, los especialistas en geopolítica internacional anuncian el fin de la globalizaciónneoliberal, lo que implica establecer un nuevo modelo económico que considere tres factores fundamentales: La salud, el bienestar de los ciudadanos y la relación con el planeta.
Derivado de las malasexperiencias que nuestro país ha experimentado en materia de corrupción e impunidad, pobreza y desigualdad, inseguridad y violencia,el gobierno de la cuarta transformación (4T) ha decidido implantarun modelo económico denominado“Estado de bienestar”, se trata de un concepto político - económico con el que se designa a un modelo de estado y de organización social donde el estado se encarga de cubrir los derechos sociales de todos los ciudadanos del país.No se trata de un término nuevo, su origen provienede finales de los años veinte y primeros años treinta del siglo XX, si bien con distintas expresiones: como “New Deal” en los EEUU, “WelfareState” en Suecia y posteriormente con la misma expresión en el Reino Unido,nace muy ligado a proteger al trabajador de las incertidumbres del mercado y el desarrollo de los partidos democráticos. Se basa en los principios de igualdad de oportunidades, distribución equitativa de la riqueza y responsabilidad pública, busca que las personas con una desventaja económica o social dispongan de unos ingresos mínimos para evitar que caigan en la marginalidad, plantea que el principal método de redistribución de ingresos es la recaudación de impuestos y establecimiento de tasas, retirando fondos de algunos ámbitos para destinarlos a otras partidas.
Un testimonio de éxito internacional en política económica intervencionista, la podemos verificar en la historia de los Estados Unidos, quien tras la crisis de 1929, muchos países se volcaron hacia regímenes totalitarios para salir de la catástrofe financiera, sin embargo,con la llegada de Franklin D. Roosevelt en 1932, se decidió un cambio en la política de la nación, abogando por una nueva distribución de rentas, llamada “New Deal”, con estas medidas adoptadas, se logró salvar el capitalismo americano mediante un estricto control estatal.
Nodebe resultarnos ajeno el discurso del gobierno de la 4T, al expresar que en su política económica se contemple “primero los pobres”,especialmente cuando la mitad de la población no tiene un ingreso suficiente para adquirir la canasta básica, y lo que vino a hacer este virus es revelar la desigualdad y niveles de precariedad que viven muchas familias, donde la mayor parte de la concentración de la pobreza se encuentra en el Sur del país, en zonas endémicas rurales.
La pandemia del covid-19, le ha permitido al gobierno de la 4Temprender reformas tendientesalcambio de régimen político y modelo económico, donde evidentemente se anuncia el fin del periodo neoliberal y las reglas del libre mercado, para transitar a las reglas de un “Estado de bienestar y Economíapara el bienestar”, recientemente hemos venido escuchando con más fuerza este concepto,el cual no debe resultarnos novedoso, ya quedesde el Plan Nacional de Desarrollo 2019 – 2024se contempló una “Economía para el Bienestar”, cuyas premisas descansan en retomar el crecimiento con austeridad y sin corrupción, disciplina fiscal, cese del endeudamiento, respeto a las decisiones autónomas del Banco de México, creación de empleos, fortalecimiento del mercado interno, impulso al agro, a la investigación, la ciencia y la educación.
Reforma al artículo 4º. Constitucional – Derechos Sociales
El pasado 8 de mayo se publicó en el Diario Oficial de la Federación una reforma al artículo 4º. De laConstitución Política de los Estados Unidos Mexicanos (CPEUM), mediante la cual se establecen como derechos humanos fundamentales el derecho a la salud, pensión universal de adultos mayores, apoyo económico a personas con discapacidad y becas para estudiantes en todos los niveles; es decir, dejan de ser programas de gobierno para convertirse en derechos sociales.
La nueva política económica en los tiempos del coronavirus
Así mismo, el pasado 15 de mayoel presidente compartió a través de redes sociales el ensayo “La nueva política económica en los tiempos del coronavirus”, mediante el cual da a conocer los siguientes cinco principios pilares de la nueva política económica:democracia, justicia, honestidad, austeridad y bienestar.
Reforma al artículo 25 Constitucional – Incorporación del Estado de Bienestar
la siguiente modificaciónimportante asociada al proyecto de la 4T se encuentra en camino,el pasado 26 de mayo, el Senador Martí Batres Guadarrama, presentó una iniciativa con proyecto de Decreto mediante la cual se busca reformar el artículo 25 de la CPEUM, cuya finalidad esincorporar el concepto de “Estado de Bienestar”,destacando la necesidad de intervención del Estado en las fuerzas del mercado. Impulsando medidas, como: ampliación en la infraestructura de salud y educativa, promover la democratización sindical, eliminar prácticas de contratación como tercerización y “outsourcing”, reducción sostenida de la economía informal, fomento a iniciativas de economía social y solidaria, eficiencia en el cobro de impuestos.
Hoy confluyen dos circunstancias que son adversas, entre el libre mercado y la intervención del estado en la economía, el papel de los ciudadanos organizados desempeña un papel primordial, la única manera de fortalecer a México es la participación activa en la vida pública.
“Nadie hará por el pueblo lo que el pueblo no haga por sí mismo”
Lic. Y M.C.I. Rafael Munguía Garduño
Especialista en impuestos y comercio internacional
Catedrático, columnista, conferencista, asesor y promotor cultural.
rm.asesor.fiscal.legal@gmail.com
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