El ser humano, es el único capaz de ser depredador de su misma especie y que, en toda la historia de nuestro País, y quizás en los del mundo entero, así lo ha demostrado. El poder y el dinero público, han sido la tentación que la humanidad no ha podido vencer jamás. Con el crecimiento de las “democracias modernas” se han establecido formas y maneras de ganar engañando a quienes votan por tal o cual personas. Así les es muy conveniente en realidad no dar la verdadera oportunidad para que las personas puedan mejorar y, subir en su nivel de vida a la clase media,.
Lo anterior es claro cuando ponderamos el porque. Cuando las personas mejoran su estatus económico, y mejoran, para dejar de ser pobres dejarían de ser clientes electorales y podrían ser entonces, dueños de un patrimonio y por ello, enemigos del sector público, en contra de todos los abusos que son en demasía conocidos.
La cancelación del aeropuerto puerto de Texcoco, igualmente, cancelar Pro-Mexico, y también la desaparición del Consejo de Promocion turística, además las rondas petroleras y proyectos de energía eólica, amén de muchas otras cancelaciones de muchos proyectos, construidos por los mexicanos, han aterrorizado y hecho que se cancelen, muchas inversiones domésticas pero igualmente, extranjeras. Todo ello hubiera creado mucho más fuentes de empleo que las que se han perdido. Pareciera, entonces, que las intenciones son, crear más pobres en este País. Para asegurar los clientes electorales que esperan que el dinero de campañas llegue a ellos, para obtener el triunfo “electoral”.
Todo está en torno a los proyectos del Presidente, aún cuando han tenido un origen popular en extremo obscuro y da pena ajena, pues haber ganado con más de treinta millones de electores, en ninguna de sus consultas: en urnas o, a mano alzada, logró un número decente de representación para decidir en uno u otro sentido, el futuro de las obras que necesita Mexico. Más aún, su haber electoral tan numeroso, hoy se encuentra muy diezmado.
Se han ido millones de divisas del País ante la cerrazón que reina, ya que, es una solo visión de País y, el fantasma del autoritarismo se asoma. El discurso, no termina de emparejar con las acciones que no responden a las necesidades de la Patria. Pareciera que se busca que los que generan fuentes de empleo se vallan de Mexico y así, quedarían cada vez más pobres, a quienes, ante la imposibilidad de movilizarse, sería más fácil de controlar a través de amenazas y dádivas. Eso no es lo que el mexicano busca.
El pacto fiscal, la escasez para la atención de la salud de los mexicanos, tanto para quienes la reciben, como para quienes la dan, la falta de recursos para quienes lo generan, está tensando la relación del Pacto Federal y las reclamaciones de gobernadores, no se han hecho esperar. El rompimiento del Ejecutivo con los empresarios, enfriando la inversión doméstica, nos deja ver que nada importa sino es en torno a la cuatro t. Los rompimientos se van sumando. ¿Podría Mexico, entrar en litigios de territorio?
Las transformaciones y actualizaciones, siempre son buenas, de hecho hay que perseguirlas y realizarlas; solo que tratándose de una gran comunidad como la de un país cualquiera, tendría que ser multicultural y pluriétnico, vamos, en términos muy claros, incluyente.
@jaimechalita