Lilia Quevedo | Plano Informativo | 12/04/2020 | 01:51
Luego de COVID-19, la sociedad no volverá a ser la misma
Las crisis tienen la virtud de dejar al descubierto lo bueno y malo de las organizaciones humanas, poniendo además a prueba la capacidad de los pueblos para resolver las dificultades, sin embargo esta es la primera vez que una crisis sanitaria paraliza al mundo entero.
En este escenario catastrófico, el director de la Facultad de Ciencias Sociales y Humanidades de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí (UASLP), Miguel Aguilar Robledo, advirtió que la sociedad no volverá a ser la misma tras el paso de la pandemia. Las instituciones están siendo puestas a prueba y seguramente van a salir menguadas, pero si aprenden de las crisis, saldrán más fortalecidas, aunque es posible que tarden en volver a ser lo que eran, expuso el especialista.
Normalidad debe empezar desde las estructuras familiares
El especialista universitario consideró que la normalidad es relativa, ya que por definición es una construcción histórica y social, esto significa que lo que se considera normal, puede variar de una generación a otra, hay muchas cosas que ahora se consideran normales, pero que en su momento fueron anormales.
“La crisis como la que estamos viviendo, con su impacto también en el sector económico, los empleos, finanzas, en la producción, simplemente nos van a obligar, como sociedad, a construir una nueva normalidad”.
Aguilar Robledo señaló que la “normalidad” post pandemia que se construiría, debería de ser en torno a las instituciones que se han constituido como sociedades humanas, desde las estructuras familiares hasta el subsidio para instituciones dedicadas al sector salud.
Vamos a construir una normalidad más solidaria
Advirtió que “si aprendemos de las lecciones, de las crisis, probablemente vamos a construir una normalidad con componentes de mayor solidaridad humana, vamos a darle mayor atención a las estructuras que permitan mitigar y encausar ese tipo de crisis de salud, como esta pandemia del COVID-19, seguramente vamos a robustecer las instituciones de salud, vamos a prepararnos para más virus, porque por la forma en la que nos hemos relacionado con la naturaleza, difícilmente esto puede cesar”.
En la economía se observará qué tan resilientes son las estructuras económicas que han construido los países para garantizar el empleo, el ingreso, la producción que requiere la sociedad para seguir viviendo.
Habrá instituciones económicas más fuertes
Y es que según Robert J. Shiller, premio Nobel de Economía en 2013, esta prueba ha sido la auténtica placa de Petri del COVID-19. ¿Qué vendrá cuando pase? “La epidemia aporta una mentalidad de tiempos de guerra, pero una mentalidad que une a todo el planeta en el mismo lado. Los años de guerra son periodos de una gran cohesión interior de los países y de la preocupación por los otros”.
El Premio Nobel considera que “un efecto a largo plazo de esta experiencia podrían ser unas instituciones económicas y políticas más redistributivas: de los ricos hacia los pobres, y con mayor preocupación por los marginados sociales y los ancianos”.