Yamena.- Hissene Habré, dictador de Chad entre 1982 y 1990, tendrá prisión domiciliaria durante dos meses, debido a su vulnerabilidad para enfermarse de COVID-19.
El juez aceptó la demanda interpuesta por la defensa de Habré, la que argumentó los 77 años de edad y el hacinamiento que existe en el centro penitenciario para solicitar que se le permita pasar la crisis por la nueva cepa de coronavirus, fuera de la prisión.
“La cárcel es un entorno que presenta riesgos reales de contaminación por el virus e Hissène Habré, de edad avanzada, es particularmente vulnerable”, recoge la autorización de libertad provisional firmada por el juez Babacar Ndiaye Fall, según el diario El País.
Gracias a la resolución, el expresidente chadiano podrá permanecer en su casa e incluso podrá salir, aunque sólo con permisos especiales y por razones médicas.
Habré fue condenado a cadena perpetua en 2016 por crímenes de violencia sexual, ejecuciones masivas y tortura durante el período que estuvo en el poder.
Entre 1980 y 1992 su régimen torturó a decenas de miles de personas y se calcula que unas 40 mil fueron asesinadas o murieron en los distintos centros de detención creados por su régimen.
Se trataba tanto de militantes de la oposición como de miembros de las etnias Hadjarai y Zaghawa que fueron acusados de conspirar contra la seguridad del Estado, documentó en su momento el medio español.
La condena de Habré fue considerado un hito pues fue el primer dictador juzgado por un tribunal africano creado ex profeso y en aplicación del principio de justicia universal.
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