Hablemos de… HONRAR AL MAESTRO NOS HONRA

Ya no recordamos quién fue el autor de la iniciativa de rendir homenaje a los maestros mexicanos el 15 de mayo, pero ¡bien haya quien haya sido!

Son ellos, los profesores de primaria, quienes nos enseñaron las primeras letras y nos ayudaron a dar los primeros pasos en la vida de comunidad. Inclusive, en nuestra niñez nos daban normas de conducta y bases de civismo y respeto a nuestros mayores y a los símbolos patrios, enseñanzas que desgraciadamente se han perdido en nuestros días por motivos y razones que conocemos pero que esta vez no tiene caso mencionar.

Sólo queremos rendir homenaje a quienes por vocación contribuyeron a nuestra formación como ciudadanos de bien y con un inquebrantable respeto a valores universales que jamás pierden vigencia por duros que sean los embates de la adversidad y de los enemigos de la verdad, la razón y la justicia, que han sido nuestra guía de vida desde que recibimos la instrucción primaria y las primeras reglas de convivencia en sociedad.

El 15 de mayo forma parte de nuestra personalidad y ocupa un lugar preponderante en nuestra conciencia y en nuestros afectos. Los profesores de primaria, egresados de la centenaria Escuela Normal del Estado, eran maestros por vocación y forjadores de hombres y mujeres con la ética y los principios morales que ellos mismos practicaban. En ocasiones anteriores hemos mencionado los nombres de muchos de ellos porque estamos convencidos de que hicieron una aportación de gran trascendencia al crecimiento de San Luis Potosí como parte integral de la República Mexicana y del mundo entero.

Por medio de estas líneas rendimos un ferviente y respetuoso homenaje a los viejos maestros y a todos aquellos mentores que han seguido sus pasos hasta el presente.