Juan Manuel Carreras toma las riendas contra la inseguridad

EL HABER ENTRADO prácticamente en la última etapa de la administración estatal, ha obligado al gobernador Juan Manuel Carreras López a tomar el toro por los cuernos en lo que se refiere al combate a la delincuencia, y contrario a lo que han señalado sus principales detractores o los agoreros de la desgracia, las últimas acciones así lo demuestran.

ES EVIDENTE QUE UNA DE LAS principales preocupaciones de los mexicanos es el problema de la inseguridad que azota a cada uno de los estados y municipios de nuestro país, donde San Luis Potosí, tampoco escapa a esta triste realidad.

SIN EMBARGO, LO QUE PUEDE hacer la gran diferencia frente a otras entidades, es el hecho de que sus autoridades atiendan puntualmente esta problemática, pues de lo contrario estarán condenados a sufrir el rechazo de la sociedad.

PUDIMOS CONOCER QUE GENTE cercana al primer círculo del gobernador, que a finales del mes de enero del presente año, el gobernador Carreras, acompañado del secretario general Alejandro Leal; el secretario de Seguridad, Jaime Pineda; el Fiscal General, Federico Garza; y el comandante de la 12ª. Zona Militar, Guzmar Ángel González Castillo, sostuvieron un encuentro con autoridades de Guanajuato y Jalisco con el único fin de establecer medidas conjuntas para combatir los embates de la delincuencia organizada.

CIERTAMENTE LA ADMINISTRACIÓN de Juan Manuel Carreras, a diferencia de sus antecesores, ha reconocido puntualmente la problemática que se enfrenta en San Luis Potosí en materia de inseguridad, (esto es un primer paso), pues ante una realidad innegable, ya no hay cabida a aquellas frases celebres: “son casos aislados”, “aquí no pasa nada”, “la inseguridad es pasajera”, donde sólo se buscaba justificar la falta de respuesta y capacidad para enfrentar la inseguridad.

CON ESTO NO PRETENDEMOS asegurar que ahora sí el gobierno va a terminar con la inseguridad, sino que buscamos sólo dar a conocer lo que se está haciendo en materia de seguridad para recobrar la tranquilidad robada a los potosinos.

ADEMÁS, TAMPOCO PODEMOS cerrar los ojos a una realidad de violencia que nos ha alcanzado, posiblemente ante la impunidad que prevalece por un sistema de justicia penal que no ha cumplido con las expectativas para las que fue creado.

NOS COMENTAN QUE EN LAS reuniones que se han sostenido con autoridades de los estados vecinos al territorio potosino, también hubo quejas en el sentido de que no todo en San Luis Potosí es miel sobre hojuelas, pues existen antecedentes que reflejan que los delincuentes originarios de nuestro estado también ingresan a otras entidades a delinquir. “Esto preocupó aún más a nuestras autoridades”.

DE ENTRADA SE ACORDÓ QUE EN el caso de las zonas limítrofes con Guanajuato y Jalisco, pondrán en marcha una serie de operativos con apoyo del Ejército y la Guardia Nacional, para evitar que el efecto “cucaracha” permita el ingreso de integrantes de la delincuencia organizada que buscarán huir ante el despliegue de más efectivos que realizó el gobierno federal, principalmente de Guanajuato.

LOS QUE SABEN DE ESTE TEMA aseguran que el General de Brigada DEM Guzmar Ángel González Castillo, comandante de la 12ª. Zona Militar, no vino a jugar a San Luis Potosí, y por el contrario, al parecer está decidido a generar el apoyo que requiere el gobierno de Juan Manuel Carreras, quien ahora más que nunca requiere de la ayuda para evitar que sigan los hechos de violencia, sobre todo en los municipios de Salinas, Villa de Reyes, Valles, Ébano, Villa de Arriaga, Matehuala, Soledad y la Capital, que están considerados entre los de mayor peligrosidad, de acuerdo al Sistema Nacional de Seguridad.

TAMPOCO PODEMOS NEGAR QUE a nuestro gobernador, lejos de faltarle realizar cambios en las estructuras de la Seguridad Pública, lo que requiere es que se apliquen políticas y estrategias efectivas que permitan disminuir y combatir la incidencia delictiva, sobre todo aquella que atenta contra el patrimonio de los potosinos, esto sin descuidar las acciones que tienen que ver con el combate a la delincuencia organizada.

RECIENTEMENTE PUDIMOS conocer las declaraciones del líder del comercio establecido en San Luis Potosí, Alberto Narváez Arochi, en el sentido de que sus agremiados se están armando con pistolas para enfrentar la inseguridad que se vive en el primer cuadro de la ciudad, e incluso en los comercios de la periferia, como si eso los pudiera salvar.

LA PREGUNTA PARA ESTE dirigente sería ¿De dónde están o estarían sacando las armas de fuego?... Este tipo de declaraciones habla de la falta de confianza hacia las autoridades, pero también refleja lo que están provocando algunos miembros de nuestra clase política al pretender tomar como bandera política el tema de la seguridad pública, generando odio, rencor y animadversión en contra de las propias autoridades.

PARA ALGUNOS PERSONAJES, seguramente el “blindar las fronteras de San Luis Potosí”, no es la solución más adecuada, sin embargo desde mi punto de vista, muy en lo particular, es un avance el convenir con las autoridades vecinas que se trabaje de manera coordinada pero con un mismo fin, lo cual puede ser muy benéfico en el corto plazo.

SEGURAMENTE ESTAMOS A tiempo de que nuestras autoridades tomen las riendas para recuperar la tranquilidad de los ciudadanos, porque no se puede perder de vista que este cáncer que es la inseguridad, no sólo afecta la paz social, sino que provoca que se ahuyenten las inversiones, se rompa la confianza y el Estado se vaya al traste… "Y esto nadie lo quiere, porque no se puede gobernar de rodillas ante la delincuencia".