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Cómo evitar, prevenir y lidiar con el estrés financiero

Veintitantos | 13/01/2020 | 23:52

Después de darnos gusto durante las fiestas decembrinas, llega la cuesta de enero cargada de deudas, ¡y tú sin dinero! Esto genera el llamado estrés financiero, un estado de angustia y ansiedad que es pésimo para la salud. Por eso aquí te decimos cómo evitar, prevenir y lidiar con él para que no cause estragos en tu vida.

 

El Financial Health Institute define el estrés financiero como una condición causada por eventos que crean ansiedad y preocupación, a menudo acompañados de una respuesta física. Éste te vuelve propensa a desarrollar problemas de salud que pueden provocar graves enfermedades.

 

Las dificultades económicas no son fáciles de sortear, ya que afectan todas las áreas de la vida: familiar, social, etc. Pero eso no significa que no puedas hacer nada para aliviar la tensión y poner en orden tus finanzas.

 

Aquí van 6 consejos de la American Psychological Association (APA) para lidiar con el estrés financiero: 

 

1. Toma una decisión financiera a la vez

 

Cuando las personas se enfrentan a múltiples decisiones consecutivas que prueban la fuerza de voluntad, ésta se puede agotar fácilmente. Por eso es clave espaciar las decisiones financieras en lugar de tomar demasiadas a la vez y sentirte abrumada. 

 

2. Rastrea tus gastos

 

Dar seguimiento a tu dinero puede ser una herramienta efectiva, así que lleva una lista de todas tus compras diarias. Esto te ayudará a concientizarte de las “fugas” que tienes y evitará que acabes diciendo “no sé en qué se me fue la quincena”. 

 

3. Identifica los factores estresantes financieros y haz un plan

 

Haz un balance de tu situación económica (ingresos vs. egresos) y arma un plan para reducir gastos o administrar tu dinero de manera más eficiente. 

 

Checa qué es lo que te causa más estrés: no tener suficiente dinero para necesidades básicas, tener lo justo o para vivir y no ser capaz de darte tus “gustitos”, endeudarte por mantener tu estilo de vida, etc.

 

Esto puede provocar estrés a corto plazo, pero si te apegas a un plan financiero reducirás el estrés a la larga.

 

4. Reconoce las consecuencias del estrés relacionado con el dinero

 

Algunas personas recurren a hábitos poco saludables para aliviar el estrés financiero: fumar, beber, apostar, comer emocionalmente o usar estupefacientes. La tensión económica también puede generar más conflictos y discusiones con la pareja y la familia. 

 

Si identificas que estás canalizando la ansiedad con actitudes dañinas, considera buscar ayuda con un profesional de la salud mental antes de que el problema empeore.

 

5. Evita la tentación

 

Trata de permanecer alejada de las tiendas y centros comerciales, por lo menos en lo que resuelves tus finanzas. Evitas las oportunidades de hacer gastos impulsivos dejando tus tarjetas de crédito y débito en casa. Limitarte a usar solo efectivo te hará más consiente, pues duele más entregar un billete que pasar la tarjeta. 

 

6. Pide apoyo

 

A todos nos da penita admitir que tenemos problemas de dinero, pero es necesario ser honestos con nuestro círculo más cercano: pareja, familia y amigos de confianza. Tener un sistema de apoyo puede ayudarte a alcanzar tus objetivos financieros. 

 

Si tus deudas te rebasan llama a tu banco para establecer un plan de pago para las tarjetas de crédito o préstamos que hayas solicitado.

 

Puesto de la manera más simple, se trata de sentarte a evaluar tus finanzas y hacer un plan que contemple principalmente un presupuesto para gastos necesarios y pago de deudas. Si al final tienes un “sobrante”, entonces puedes pensar en darte tus gustitos y hasta empezar a ahorrar. 

 

Si ves que lo que ganas simplemente no te alcanza hay dos opciones: bajas gastos o aumentas ingresos.  

 

Lo importante es abordar los problemas financieros de frente y lo más pronto posible para evitar el estrés. Quedarte solo sintiendo angustia no te ayudará, por el contrario, te impulsará a tomar peores decisiones. Así que actúa y toma el control de tu dinero antes de que éste tome en control de tu vida, tu cuerpo y tu salud mental.