GMC Acadia 2020, ¿es una buena compra?

Mucho se ha dicho que las SUV medianas, fueron las culpables de mermar las ventas de las minivans. No serán tan espaciosas, pero igual tienen un carácter familiar, pero, sobre todo, añaden un toque de status y de versatilidad que un monovolumen no puede ofrecer.

Y si de SUV hablamos, GMC, la marca especialista de General Motors en la construcción de camionetas, es una de las marcas con más experiencia creando este tipo de vehículos (desde 1937 para ser más específicos), por ello, no resulta raro que se encuentre bien representada en este segmento con la GMC Acadia.

Para el modelo 2020, esta camioneta presenta una importante actualización de media vida, la cual, por suerte no sólo se limita a una ligera actualización estética sino también incorpora mejoras mecánicas y de confort.

En el interior la principal novedad recae en una consola central remozada que integra la palanca de velocidades Electronic Precision Shift, así como un actualizado sistema de info entretenimiento que, mantiene una pantalla de 8 pulgadas y presume un software más rápido e intuitivo.

En cuanto a seguridad, las ocho bolsas de aire y ayudas a la conducción como asistente de mantenimiento de carril, sensores de punto ciego, control crucero automático, sensores de tráfico cruzado y de punto ciego, vienen de serie.

DOBLE PERSONALIDAD

Una de las principales características de este modelo es que no se puede hablar de una sola GMC Acadia 2020, sino en realidad, su oferta se compone de dos versiones, que cuentan con sus propias particularidades e incluso personalidad.

Comencemos con su versión AT4, que sin ser un todoterreno puro y duro es capaz de realizar algunas incursiones de off-road ligero. Estéticamente se distingue por la parrilla en cromo negro, rieles al techo y barras transversales, insertos interiores en Kalahari.

Su carácter aventurero, está respaldado por un sistema de tracción AWD con Twin Clutch (que envía la tracción a la rueda que más lo requiera) y control de descenso en pendientes. En este caso cuenta con capacidad para hasta 7 pasajeros.

En la parte más alta se encuentra el acabado Denali, de perfil premium. En este caso la dotación de equipo consiste en la integración del Adaptive Ride Control, Head up Display, Full Mirror Display, cámara 360º, asistente de colisión frontal y detección de peatones. Esto sin olvidarse del cargador inalámbrico para smartphones. También equipa tracción a las cuatro ruedas, pero en este caso se prioriza el desempeño en carretera.

Puertas adentro encontramos, asientos tipo capitán donde pueden viajar cómodamente y a sus anchas seis tripulantes, al mismo tiempo que encontramos materiales de buena calidad, destacando los asientos y volantes forrado en piel, así como los insertos de aluminio y madera real de poro abierto.

Por cierto, sin importar si es Acadia Denali o AT4, el motor es el conocido V6 de 3.6L con 310 hp y 271 lb-pie de torque que se acopla a una nueva transmisión automática de nueve velocidades con Electronic Precisión Shift. El sistema Stop/Start y OnStar viene de serie.

¿ES UNA BUENA COMPRA?

Al tener dos personalidades, en esta ocasión se requiere un doble análisis comenzando con la Acadia AT4, con una etiqueta de $851,600 pesos. En este caso tenemos que es una de las pocas SUV medianas que en este rango de precios ofrece tracción a las cuatro ruedas, pero cuenta con el plus de que está preparada para hacer incursiones por caminos maltratados. Repetimos, no es tan capaz como una Sierra, pero te permitirá trasladar a toda tu familia a una aventura. El espacio interior, materiales y equipamiento, están medio paso arriba que la mayoría de sus competidores.

Respecto a la Acadia Denali ($944,600 pesos), es gracias a nivel de acabados y equipamiento (sobre todo de seguridad), que incomoda peligrosamente a los productos de marcas japonesas de nombres más rimbombantes, incluso, ya se mete en un terreno donde puede llegar a acercarse a su prima la Buick Enclave. La estética diferenciada, añade un toque extra de distinción.

Tal vez, no sea la más capaz fuera del asfalto, o tampoco la más lujosa, pero ofrece una relación precio-equipamiento, que pone en aprietos a vehículos provenientes de tanto marcas generalistas como de aspiraciones premium. Entonces, si lo que quieres es una SUV mediana que no sólo cumpla sus funciones de traslado familiar, sino también brinde cierto estatus, en definitiva, deberías considerarla entre tus opciones de compra.