Marco Antonio Hernández Morales | 21/10/2019 | 13:33
RIESGO.La noche del domingo a través de las redes sociales políticos, funcionarios y ciudadanos en general condenaron los hechos violentos en el estadio “Alfonso Lastras”. Es inaceptable que un espacio destinado al esparcimiento al que acuden aficionados de todas las edades, incluidos los menores de edad,ocurran hechos que los ponen en riesgo. Se dice que el operativo de seguridad fue rebasado por las masas y que poco se pudo hacer para contener a los rijosos. A lo que no debemos acostumbrarnos es que la violencia se enseñoree en los últimos espacios que nos quedan. Con la violencia que hay en las calles tenemos suficiente.
QUEJAS.Hace un buen rato que en los distintos sectores sociales la gente se viene quejando no sólo de la inseguridad, sino de la actividad de un tipo de delincuencia de medio peloque perjudica el patrimonio de las familias, comercios y escuelas. Los primeros en poner el grito en el cielo fueron los dueños de comercios del Centro Histórico, pero ahora son padres de familia a quienes no les queda más remedio que bloquear calles para llamar la atención de las autoridades por el robo constante a escuelas los fines de semana. La respuesta que se da en algunos niveles es que andan ocupados persiguiendo a los grandes delincuentes. Vaya usted a saber si es así.
OFICIO.A lo largo y ancho del país Morena ha dejado constancia que lo suyo no es la democracia y para muestra están las asambleas distritales que se suspendieron ya sea por la violencia o la práctica de viejas mañas que tradicionalmente se le atribuyeron al PRI. Por lo demás Morena no ha dado señas de actuar articuladamente para respaldar las decisiones del Presidente López Obrador, particularmente en el caso de Culiacán. Fueron los priístas Alejandro Moreno y René Juárez, presidente nacional del PRI y líder de los diputados federales, respectivamente, quienes con más colmillo y oficio político llamaron a los mexicanos a no confrontarse y cerrar filas en torno a México y su presidente.
PRESENTACIÓN.La semana pasada hicieron su presentación ante los medios de comunicación los miembros de los pueblos originarios radicados en esta capital, con el propósito de hacerse visibles y establecer puentes de diálogo con los tres niveles de gobierno a efecto de mejorar sus condiciones de vida. Muy buena idea que se hayan organizado, pues con ello le cerraron el paso a los aprovechados que muchas veces utilizaron su causa para presionar autoridades o promoverse políticamente.
CUESTIONAMIENTO.Al comparecer ante los diputados con motivo de la glosa por el Cuarto Informe de Gobierno, el titular de la SSPE, Jaime Pineda, se encontró con cuestionamientos serios a su desempeño, particularmente de la legisladora Beatriz Benavente. En una ocasión y en tono irónico el funcionario le contestó: “mire usted mi querida diputada” para luego dar paso a su respuesta.Vaya estilo del funcionario.
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