Leopoldo Pacheco / Plano Informativo | 16/10/2019 | 20:04
PORQUE HA DE SABER USTED, querido lector, que han iniciado las comparecencias de funcionarios de gobierno de San Luis Potosí en el Congreso del Estado, que refieren al análisis del cuarto informe de la administración del mandatario estatal, Juan Manuel Carreras López, y es entonces que sin duda el momento político que necesariamente muchos legisladores, como siempre, esperan este momento de encuentro para hacer del mismo muchas veces un momento propio.
MUCHOS ESTARÍAN NOMAS apretándose los huesos, aguardando el momento de cuestionar a los funcionarios, y otros sin duda estarían poniendo una alfombra roja y cuestionamientos a modo a fin de enaltecer la actividad de los funcionarios que asisten, sin tener verdaderamente la obligación de hacerlo, como podría pensarse.
Y ES QUE ES NECESARIO DEJAR EN claro que no deja de ser una oportunidad como pocas, el hecho de que los legisladores, acercándose cada vez más los momentos políticos del cambio de administración, pulan más los cuestionamientos, las preguntas, se infiera la sospecha, ah eso sí, mientras sea público, mientras estén los medios de comunicación, pues este ejercicio desde hace mucho se ha convertido en más que otra cosa, en un acto de protocolo.
DESDE QUE SE REALIZA ESTE ejercicio ha sido magro, por no decir nulo, el resultado de algún cambio en la forma de gobernar, porque todo aquello que pueda decirse lleva consigo necesariamente la carga o el peso político del partido que se representa, y ese no deja de ser el común denominador, más ahora que se aproximan los tiempos electorales.
ASÍ QUE MIENTRAS MUCHOS diputados apenas están afilándose las uñas y dientes para los funcionarios que faltan, no pierda de vista la semana entrante que llegarán los responsables de la seguridad, que no ha dejado de ser uno de los puntos que más ha despertado la crítica, no solo de la oposición política sino de la sociedad en general; podemos esperar que el encuentro sea en verdad desgastante para sus participantes, que a diferencia de otras ocasiones, posiblemente no se vayan a aguantar el responder, por no decir rezongar, a las airadas críticas o hasta mentadas de las que puedan ser objeto.
EL ÁNIMO DE CONSTRUIR DESPUÉS de estos encuentros sería en todo caso la parte a la que yo, en lo personal, podría hacer mención en el sentido de entender que este tipo de encuentros no puede ser una acto protocolario o de lucimiento político, si en realidad de todo esto no hay un resultado real en beneficio de la sociedad.
DE QUÉ ME SIRVE COMO ciudadano que le digan al señor responsable de la secretaría que hay corrupción, si al final del día todo sigue igual, por ejemplo.
CON LO OCURRIDO EN MICHOACÁN, en donde varios agentes de policía fueron ejecutados por la delincuencia el pasado fin de semana, no deja de ser importante el derecho que tendrán los policías a despotricar de su gobierno y hasta de sus propios mandos, si es que la triste conclusión a todo esto, es que no cuentan con el apoyo necesario para seguir haciendo su trabajo en la calles, dado que la directriz es no iniciar una guerra contra la delincuencia, pues al gobierno de México en su empeño por ser diferente se le olvida que la guerra ya se había iniciado y que jamás hubo una tregua, y que no habrá cuartel en una situación que da como resultado un gobierno a modo, que está empoderando a los delincuentes y enterrando a sus policías.
Lo que pasará, en todo caso, es que los policías dejen de serlo y los ciudadanos se conviertan en protectores de su propio entorno. Para entonces, tratar de recuperar al país resultará demasiado tarde.
HASTA LA PRÓXIMA.