Cosas que JAMÁS debes dejar de hacer por amor

Que estés en una relación no es impedimento para que sigas con tus pasiones en la vida. ¡Esto es lo que jamás debes dejar de hacer por amor!

Estar en una relación puede ser algo magnífico, sin embargo, cuidado con esto: hay algunas cosas que no puedes abandonar por amor. Si bien habrá vecesque deberán negociar algunas situaciones (con quién pasar las fiestas navideñas o cosas por el estilo), hay otras que ni siquiera están en la mesa de conversación, y son las que tienen que ver con tu crecimiento personal. Estas son las cosas que jamás debes dejar de hacer por amor (y sí, viceversa: son cosas que no le puedes pedir a alguien que quite de su vida).

Viajar

Y no nos referimos a viajar con tu pareja, sino que si un día quieres hacerlo sola o con tus amigas, tienes todo el derecho del mundo a hacerlo. Si hay un destino que siempre habías querido conocer por tu cuenta, una pareja no debería ser impedimento. Simplemente comunícaselo y listo. Si empiezan los problemas, créenos, eso siempre es una bandera roja en cualquier relación.

Pasar tiempo a solas

Se tiene sta idea totalmente errónea de que las parejas deben pasar TODO el tiempo juntas, pero no hay cosa más falsa en el mundo. De hecho, recordemos algo muy importante: si en una pareja ambos integrantes cuidan su individualidad, el noviazgo va en buen camino y ser exitoso por mucho tiempo. Entonces lo más importante es que así como hay que respetar el tiempo que pasan juntos, respeten su tiempo libre a solas. No importa si es para dormir, leer o lo que sea: es tu tiempo y es igual de valioso.

Estudiar

Si siempre habías querido estudiar un taller o un diplomado, mismo caso: el amor no tendría por qué ser (JAMÁS) un impedimento para que lo logres. El fin de una relación es crecer juntos, y estudiar puede llevarte a nuevos caminos laborales, o simplemente encontrar una nueva pasión, para lo cual estás en todo tu derecho.

Trabajar

Este punto es muy importante: si estás en una relación, y tu pareja te pide dejar de trabajar... si tú no deseas hacerlo, no tienes por qué. Dentro las hermosas ideas por las que lucha el feminismo, es que todas las mujeres tengamos el derecho a decidir lo mejor para nuestras vidas, y si tú deseas seguir trabajando, no tienes que abandonar tu carrera. Ninguna persona vale la pena como para que hagas a un lado tus sueños.

Salir con tus amigos

Otro clásico: se cree que en una relación, las salidas con los amigos se anulan... ¡pero al contrario! Estar al corriente con lo que pasa con tus amigos y tener una que otra salida son una fuente inagotable de buenas experiencias, un desahogo del estrés y también es la oportunidad de recordar que sin tu pareja, sigues siendo una persona inidividual que puede divertirse de diversas formar. Suena un poco extraño, pero lo decimos en serio: ¡sal más con tus amigos!

Expresarte libremente

Estando en un noviazgo o no, tienes todo el derecho a expresar tus ideas. Siempre hay modos de hacerlo (y si hay algo en que no estén de acuerdo, siempre está la manera adulta y madura de conversarlo) pero eso no quiere decir que debas vivir en silencio para que la otra persona esté feliz. Jamás, por favor.

Hacer tus compras

Un problema muy común de la vida en pareja, es creer que el otro debe ser un vigilante de las cosas que adquirimos...y no, eh. Para eso trabajas y para eso ganas tu debido dinerito. Ahora bien, ten cuidado en este punto: si tienen un plan de ahorro en pareja y quieren irse de viaje o comprar una casa, en ese caso sí recomendamos que pongas claras tus prioridades, porque es muy diferente no tiener una meta y comprar cosas que te gustan, que cuando compartes un futuro con alguien y tratan de esforzarse porque se haga realidad. La palabra clave aquí es: meta. Si hay un propósito compartido, deben ser responsables.

Vestirte de otra manera

Si a tu pareja no le gusta la manera en que te vistes: bye. No hay de otra. Nadie te puede cambiar, y así como NADIE tiene el derecho a pedirte que hagas cosas que no quieres, nadie puede pedirte que cambies tu look si tú no lo deseas. Y hablamos de que nadie puede pedirte usar vestidos si no quieres, pedirte que te maquilles menos o que cambies tu peinado. No, no, no. Cada persona tiene un estilo propio, y si has trabajado tu autoestima, nadie puede pedirte ser lo contrario a tu esencia.

Ser tú misma

Así de simple. Si eres introvertida, extrovertida, un poco masculina, muy femenina, fiestera, tranquila, un alma vieja, amante del k-pop, rocker, geek... siempre sé tú misma. Que nadie te diga que no puedes brillar.