Jueves 28 de Marzo de 2024 | San Luis Potosí, S.L.P.
negocios

México necesita reducir importaciones agrícolas, destaca Sader

Notimex | 26/09/2019 | 22:14

El secretario de Agricultura, Víctor Villalobos Arámbula, señaló que México no podrá resolver el tema de la seguridad alimentaria mientras la alimentación de la mayoría de los mexicanos dependa de las importaciones. 

 

México se convirtió en la principal nación importadora de varios productos básicos, maíz, por ejemplo, como consecuencia de políticas públicas de las últimas décadas, reconoció el titular de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader).

 

“Distinción lamentable si se considera que somos centro de origen, domesticación y fuente de riqueza y diversidad genética de esta especie, base de la alimentación de los mexicanos".

 

Al participar en el Foro Global Agroalimentario 2019, el funcionario recordó que en 2016 se ocupó el segundo lugar como país importador de leche y el tercero de carne de cerdo, de acuerdo con un comunicado de la dependencia.

 

En 2017 se había importado 31.2 millones de toneladas de granos, de cuales 47 por ciento fue de maíz, 14.2 de trigo y 3.5 de arroz, apuntó ante empresarios y funcionarios en León, Guanajuato.

 

Y para satisfacer el consumo nacional, indicó, el país importó importamos 36 por ciento de maíz, 95 por ciento de arroz, 68 por ciento de trigo, 50 por ciento de carne de cerdo y 37 por ciento de lácteos durante 2017.

 

"Por supuesto que existe un amplio grupo de productores nacionales que tiene capacidad para abastecer el mercado interno y quisiéramos que todos se sumaran a esta tarea de producir alimentos".

 

Por ello, Villalobos Arámbula convocó al sector agroalimentario nacional a construir el futuro del campo con una visión de largo plazo, compromiso con el desarrollo del país, responsabilidad social y sin sectores asimétricos.

 

Aseguró que el gobierno mexicano “respalda y respaldará a los sectores más competitivos que han convertido al país en una potencia agroexportadora, pero tiene el imperativo moral de apoyar más a quienes han sido excluidos”.

 

“No podemos permitir que se siga profundizando la desigualdad entre la agricultura empresarial y mediana y la pequeña y de subsistencia, ni la desigualdad en los niveles de productividad y el acceso a los recursos financieros, a los insumos, al conocimiento, a la tecnología y a los mercados”, manifestó.

 

“Todo ello deriva en una enorme desigualdad en los ingresos”, apuntó durante su intervención en el encuentro organizado por el Consejo Nacional Agroalimentario (CNA).

 

El campo mexicano, acentuó, es fuerte y su potencial lo es más, pero se debe estar preparados para enfrentar los desafíos y retos del sector y fortalecer nuestra posición internacional, donde ocupa la onceava potencia en la producción de alimentos de cultivos agrícolas y de ganadería primaria y 17 entre aquellas naciones con más producción pesquera y acuícola.