COMO ERA DE ESPERARSE, LAS organizaciones sociales, dirigencias sindicales y toda clase de asociación oportunista, buscará aprovechar la cercanía de las Fiestas Patrias (15 de Septiembre) para tomar por asalto el frente del Palacio de Gobierno como media de presión hacía la autoridad estatal a fin de obtener una respuesta a sus demandas, y en el peor de los casos para buscar un beneficio personal para sus dirigentes que nada tiene que ver con la verdadera defensa de los derechos de los que menos tienen, y mucho menos de sus representados.
DESGRACIADAMENTE EXISTEN organizaciones (oportunistas) que han visto como su modus operandi, aprovechar todo tipo de fechas “clave” o representativas que pueden dañar la imagen de las autoridades; basta recordar que es muy común que pseudo dirigentes instalen sendos plantones de cara a fechas tradicionales como la Semana Santa y las Fiestas Patrias.
LAMENTABLEMENTE LAS autoridades tanto del orden estatal como municipal se han convertido en rehenes de este tipo de organizaciones que en todo momento amenazan con tomar la Plaza de Armas para exigir la atención a sus demandas.
ES NECESARIO RESALTAR QUE LAS movilizaciones, los plantones o la toma de edificios son herramientas muy válidas como parte del derecho a la libre manifestación y a la libertad de expresión que tienen todos los mexicanos.
LO GRAVE ES CUANDO ESTAS herramientas son utilizadas con fines personales o de pequeños grupos que usan a sus agremiados como carne de cañón para presionar y alcanzar sus fines.
A TODOS ESOS PSEUDO LÍDERES O redentores sociales les queda claro que la mejor presión para las autoridades es instalar un plantón frente a Palacio de Gobierno, sabiendo de antemano que serán atendidos para evitar que se pueda ver opacado o afectado, tal o cual evento que esté vinculado con cuestiones religiosas (Procesión del Silencio) o las Fiestas Patrias (Grito de Independencia).
AFORTUNADAMENTE GRAN PARTE de la sociedad potosina ya tiene muy identificados a ciertos grupos que recurren a toda clase de presión o chantaje, incluso existen organizaciones sindicales que aprovechan la proximidad de las celebraciones significativas para los potosinos, como es el caso de la controvertida dirigente del Sindicato Independiente de Trabajadores y Trabajadoras del Gobierno del Estado (Sitge), Francisca Reséndiz Lara; o el polémico dirigente de la CMAP, Miguel Ángel Wong, y algunos otros bichos raros que en estos momentos escapan a mi memoria.
RECIENTEMENTE ALGUNOS ciudadanos que acuden frecuentemente a la Plaza de Armas, nos comentaban que resulta muy triste que el frente del Palacio de Gobierno esté obstaculizado por toldos y tiendas de campaña que afectan la belleza y la imagen de una de las joyas arquitectónicas más valiosas de los potosinos.
NOS PREGUNTABAN “SI LAS autoridades no pueden hacer algo para retirarlos, o en su caso para obligarlos a que primero clarifiquen o resuelvan la situación jurídica que enfrentan algunos de los dirigentes”.
LOS COMENTARIOS NOS CAUSARON sorpresa pues la familia, visiblemente molesta, nos refería que es incongruente que la dirigente de uno de los sindicatos de la burocracia potosina (Francisca Reséndiz) esté demandando justicia cuando ella, en lo personal, no ha salido a aclarar qué pasó con la denuncia que se interpuso en su contra en el año 2017 ante la entonces PGR, por supuestamente tener una posible responsabilidad de realizar operaciones con recursos de procedencia ilícita, evasión fiscal, tráfico de influencias, cohecho y asociación delictuosa.
ADEMÁS NOS SEÑALABAN QUE, de acuerdo a un documento que fue presentado a la PGR, se señala que la dirigente sindical Francisca Reséndiz lleva una vida ostentosa llena de lujos, que derrocha dinero, realiza viajes fuera de la ciudad y del país, cuenta con propiedades y vehículos de lujo y además es un tanto opaca en la aplicación y manejo de los recursos del sindicato que representa.
AUNQUE TAMBIÉN HAY QUE aclarar que en el caso personal de quien escribe esta columna, no se tuvo a la vista dicho documento y mucho menos esa denuncia que supuestamente se presentó ante las autoridades, por lo cual, esto quedará como una simple charla o anécdota de la vida cotidiana de un simple columnista.
