La bicicleta como alternativa de transporte.

Diariamente Agustín se transporta en bicicleta. Dice que utiliza este sistema de transporte porque es benéfico no sólo para la salud si no para el ambiente pues el parque vehicular en San Luis Potosí y su zona conurbada representa el 75% de la contaminación total.

Entre los aportes a la salud, el informe “Salud y Ciclismo” elaborado por el doctor alemán en Medicina Deportiva Ingo Froböse en 2008 comprueba que el utilizar regularmente la bicicleta reduce en 50% los riesgos de un infarto además de que con su práctica frecuente se produce menos colesterol negativo, el cual es responsable de la calcificación de los vasos sanguíneos.

Además, el transitarse en bicicleta representa un medio de transporte económico pues el mantenimiento que se le da no excede los 50 pesos mensuales.

Para Agustín en San Luis Potosí sí existe la cultura del ciclismo pero lo que falta es voluntad de las autoridades para invertir un 10% del presupuesto a la infraestructura vial pues la sociedad actual ha construido las ciudades pensando más en el automóvil que en las personas y la prueba está que en la ciudad entre ciclopistas activas y abandonadas solamente existen alrededor de 40 kilómetros.

La construcción de ciudades destinadas al tránsito del automóvil privado necesariamente encarecen los servicios públicos ya que al construir más obras de este tipo se necesitarán más recursos para el mantenimiento del pavimento, la iluminación y aseo.

A su vez, este factor provoca que los espacios destinados al peatón se reduzcan ya que un auto privado ocupa el lugar de 12 ciclistas y un camión el de hasta 40 personas.

Desde 1998, Agustín Villegas pertenece a un grupo de personas que se transportan en bicicleta a la escuela o al trabajo llamada Ciclistas del Trópico de Cáncer quienes se autodefinen como un grupo de ciclistas urbanos que trabajan como voluntarios por una ciudad amigable al ciclista.

Dentro de las actividades que busca este grupo de ciclistas que tomo su nombre por el hecho de que El Trópico de Cáncer pasa por San Luis y sólo por algunas ciudades del país, están la de proponer rutas seguras a las escuelas y al trabajo, la construcción de ciclopistas y estacionamientos para bicicletas, la instauración de un departamento de educación vial y la promoción del transporte no motorizado.

Bajo esta ideología, los ciclistas del Trópico de Cáncer han participado en los foros para la elaboración de los Planes de Desarrollo Municipales, Estatales y Nacionales.

Asimismo, el grupo ha denunciado que se invirtieron más de 2 mil millones de pesos en la construcción del Boulevard San Luis y en éste no incluyeron ciclopistas, además de que esta zona es la vialidad en que han fallecido mas ciclistas en incidentes de transito en la ciudad.

Dentro de estos casos figura también el de la amplitud del distribuidor Benito Juárez en 2006 con más de 90 millones de pesos en la que no existe una banqueta continua con pasos a desnivel para los peatones y ciclistas ni mucho menos ciclopistas.

Como se señaló, el número de estas vías en la ciudad es reducido, la mayor de ellas es la de carretera a Mexquitic con 23 kilómetros de longitud. Las ciclopistas más recientes son las construidas en la Zona Industrial a la altura de la avenida C.F.E. pero que falta unirla con la existente en Eje 118. Existen otras de carácter privado como la ubicada en el Fraccionamiento Campestre y la del Parque Logístico.

Sin embargo, el número de personas que utiliza a la bicicleta como medio de transporte es reducido a lo que el entrevistado comentó que dentro de un estudio realizado en San Luis en 2006 por la investigadora Danielle Marie Fillis, quien realizó su tesis de Maestría en Artes, en Políticas y Planeación Urbana y Ambiental con el tema Barreras a la Infraestructura ciclista: ¿Por qué algunas comunidades le ponen el freno al Transporte Sustentable?, reveló que el 85% de los entrevistados utilizarían este sistema de transporte motorizado si existiera más seguridad en las calles.

Lo que a su vez arrojó que las personas que utilizan este medio se acostumbraran a lidiar con las distintas dificultades que representa el transportarse en bicicleta pues cabe destacar que un estudio en el que participaron los Ciclistas del Trópico de Cáncer reveló que de 1998 a 2004, San Luis fue la ciudad del país en donde murieron más ciclistas por accidentes automovilísticos en proporción a un espacio de 100 mil habitantes.

Agustín Villegas añadió que uno de los propósitos de este grupo de ciclistas urbanos que ha participado en más de una decena de rutas ciclistas como la Chichimeca, o paseos de la ciudad de SLP al Trópico de Cáncer en Real de Catorce, durante los solsticios de Verano de 2003 a 2005, es el de fomentar que la educación vial se dirija también al ciclista y no solamente al conductor de automóviles.

“El andar en bicicleta puede tener un significado lúdico; es regresar a la infancia cuando se acostumbraba que en Navidad te regalaran una bicicleta, San Luis debe de valorar la mala concepción de que la ciudad es un rancho bicicletero, porque ello daña menos al ambiente y reduce los riesgos a  la salud”.

Por ello, destacó la importancia de utilizar este medio porque se tendrán beneficios no sólo para la salud si no para el ambiente pues con el uso de un transporte no motorizado se reduce el impacto a la naturaleza que genera la emisión del C02 producida por los automóviles.