Viernes 22 de Noviembre de 2024 | San Luis Potosí, S.L.P.

A veces duele la cabeza sin razón aparente, ¿te has preguntado por qué?

Agencia | 27/01/2019 | 22:38

Después de un merecido break de las vacaciones muchos tenemos que volver, de una manera u otra, a la rutina casi mecánica de redactar un informe para el jefe en la oficina, llevar el extenso inventario de mercancía nueva de la tienda o retomar ese lapso somnífero de lecciones de historia o matemáticas que dejamos de concluir a mitades de diciembre del año anterior. 

 

Ese dinamismo, aunque cíclico anualmente, puede suponer para muchos un añadido de molestias o estrés que a posteriori se traducen en dolencias e incomodad en la cabeza, en diferentes formas y escalas, pero convergiendo todas en un punto: el dolor.

 

Existen muchos tipos de dolores de cabeza y entre ellos destacan cinco –los más comunes- y sus distintas maneras de afrontarlos que van desde fármacos antinflamatorios con acetaminofén hasta cambios ligeros de hábitos en el día a día. 

 

Teniendo eso en cuenta, diagnosticar en base a sus características principales te hará más fácil la tarea de identificar (y afrontar, dicho sea de paso) ese dolorcito que no te ha dejado en paz desde que entraste esa mañana a las 7:00 a. m.

 

Cefalea, ¿qué es?

Es un dolor o molestia en la cabeza, el cuello, o el cuero cabelludo. Vamos… el típico dolor de cabeza.

 

Tipos y causas

La cefalea tensional es una de las molestias dolorosas más comunes; se manifiesta como tensión muscular en los hombros, el cuello, la mandíbula y el cuero cabelludo.

  • Está relacionada con el estrés, depresión, ansiedad, algún golpe en la cabeza o mantener el cuello y la cabeza en posiciones incómodas o forzadas.
  • Suele ser en ambos lados de la cabeza. El dolor puede presentarse como una sensación de tener una banda elástica apretando el cráneo.

La cefalea migrañosa es esa que viene junto con otros síntomas como cambios de visión (borrosa), sensibilidad a la luz o el ruido o náuseas. Es bastante dolorosa.

  • El dolor puede ser punzante o palpitante. Generalmente comienza de un lado de la cabeza, pero puede propagarse hacia el otro.
  • El chocolate (sí, leíste bien) y algunos tipos de quesos pueden desencadenar una migraña junto a la falta de sueño, de cafeína o el exceso de alcohol.

Dolores de cabeza de rebote, es esa cefalea que ocurre de forma recurrente y reaparece.

  • Puede ser producto del consumo frecuente de analgésicos, así que sí… te puede doler la cabeza de tanto tomar medicina.

La cefalea en brotes es un dolor extremadamente agudo y molesto que ataca hasta varias veces al día por meses, y así como viene se va por semanas o incluso meses. En algunas personas el dolor no reaparece luego de un tiempo. Suele durar menos de una hora y se presenta rutinariamente a la misma hora diariamente.

 

La cefalea sinusal (de la sinusitis) se presenta en la parte frontal de la cabeza y la cara. Este dolor es producto de la inflamación de los conductos de los senos paranasales debajo de los ojos, la nariz y las mejillas.

 

Tratamiento:

Ya conoces varios tipos de dolor de cabeza y sus características. Ahora, ¿qué hacer con el conocimiento? Aliviar tu dolor, justamente…

  • Tomar una ducha o baño con agua tibia: deja que el agua caiga directamente en tu cabeza para que los vasos sanguíneos se dilaten y tu cuerpo se relaje.
  • Bebe café: una taza de café negro te aliviará en instantes, pero ten cuidado con acostumbrarte a este recurso pues crea adicción y pronto no podrás eliminar las cefaleas sin cafeína.
  • Colocar una compresa fría en la frente: de ser posible acuéstate o reclina tu silla lo más que puedas para facilitar la colocación de una compresa de gel fría o bolsa térmica con hielo en la cabeza.
  • Ciertos olores: sea a través de masajes u olerlo directamente, esencias como la lavanda, la menta o el romero tienen propiedades analgésicas.
  • Tomar té: toma una taza de té de jengibre puesto que tiene propiedades antiinflamatorias y analgésicas. Con 2 cm de raíz hirviendo por 5 minutos tienes. Basta con colarla y dejarla enfriar.

Si nada de esto funciona acude a la vieja confiable: una pastilla o aspirina de tu preferencia. Pero si el malestar persiste por más de tres días, con o sin otros síntomas evidentes, ve al médico. Más vale prevenir que lamentar en el caso de que sea algo grave… ¿o no?