La Universidad de Bergen, en Noruega, asegura que algunos productos de limpieza son perjudiciales para la salud y su uso puede provocar irritación en las vías respiratorias.
«El declive creciente de las funciones de los pulmones de las mujeres que trabajan en limpieza es comparable a fumar 20 cigarrillos por día», confirmaron los autores del estudio, que fue publicado por el diario científico Society’s American Journal of Respiratory and Critical Care Medicine.
Los expertos analizaron a 6235 voluntarios de alrededor de 34 años durante más de dos décadas y compararon sus resultados luego de años de análisis clínicos.
El resultado de su investigación arrojó que el volumen de aire que una persona es capaz de expirar por segundo había disminuido 3.6 ml por año en las mujeres que limpian sus casas y 3.9 en las que se ganan la vida de este modo.
El total de aire que las mujeres que limpian sus hogares pueden exhalar haciendo fuerza disminuyó 4.3 ml por año, mientras que el de las que lo hacen profesionalmente decayó un 7.1.
Eso sucede porque los químicos en los productos de limpieza pueden irritar la membrana mucosa que recubre los pulmones y, con el tiempo, puede generar daños permanentes.
La recomendación es: usar una tapa bocas cuando se está realizando la limpieza al igual que guantes y tener extrema precaución los productos que se utilizan.