Un estudio, publicado en la revista BMC Infectious Diseases, descubrió que los contenedores de seguridad son un semillero de gérmenes que pueden causar enfermedades en los seres humanos, como la gripe y el resfriado común.
Investigadores de la Universidad de Nottingham en Inglaterra y del Instituto Nacional Finlandés de Salud y Bienestar recolectaron muestras de superficies tocadas con frecuencia en tres momentos diferentes en el aeropuerto de Helsinki-Vantaa en Finlandia durante la temporada pico de gripe en 2015 y 2016.
La mitad de las bandejas en los puntos de control de seguridad dieron positivo en la detección de gérmenes que pueden enfermar a los humanos, incluidos la influenza A y el rinovirus, la causa predominante del resfriado común.
Según el informe, ninguno de estos gérmenes se encontró en la superficie de los inodoros en el aeropuerto.
Los investigadores comentaron que los resultados tienen sentido dado que el proceso de seguridad es obligatorio para todos los pasajeros y las bandejas de seguridad de plástico son “recicladas rápidamente y potencialmente tocadas por varios cientos de pasajeros por día”.
“Encontramos la mayor frecuencia de virus respiratorios en las bandejas de plástico utilizadas en las áreas de control de seguridad para depositar equipaje y objetos personales”. “Estas cajas suelen circular con alta frecuencia para los pasajeros siguientes, y generalmente se apoderan de una amplia superficie de la palma y un fuerte agarre”, escribieron los científicos.
Además, las bandejas de seguridad de plástico están hechas de materiales no porosos, lo que permite que los virus vivan más tiempo.
Otras superficies que resultaron positivas, en el estudio, para los gérmenes inductores de enfermedades incluyen pasamanos de escaleras, la zona de documentación y el cristal divisor en el punto de control de pasaportes.
Los investigadores señalaron que el riesgo de propagar enfermedades en los aeropuertos puede mejorarse ofreciendo desinfectante de manos a los pasajeros antes y después de los controles de seguridad y aumentando la frecuencia de limpieza de los contenedores de equipaje de plástico.
“Este conocimiento ayuda a reconocer los puntos críticos para el riesgo de transmisión de contacto, lo que podría ser importante durante una amenaza de pandemia emergente o una epidemia grave”, escriben.
