El Realito resultó ser solo buen negocio

San Luis Potosí, SLP.- La construcción y operación de la presa El Realito, materializó el discurso de que la ciudad de San Luis Potosí no ha podido detener su crecimiento. Desde que se lanzó el proyecto fue una obra cuestionada, no sólo por la calidad del agua que iba a suministrar, también por la necedad de trasladarla desde el río Santa María, reconoció Daniel Jacobo Marín, profesor en Derecho de Aguas del Colegio de San Luis (Colsan).

Explicó que la Manifestación de Impacto Ambiental de la presa afirma que es conveniente su construcción para atenuar la sobreexplotación del acuífero de San Luis Potosí, que llevó al colapso de pozos, hundimientos y el suministro de agua con concentraciones de flúor en cantidades nocivas para la salud (este es un grave problema de salud pública).

Bajo estos argumentos se justificó la construcción de la presa, sin embargo hay problemas en la logística de la distribución del vital líquido.

La Presa El Realito técnicamente es un trasvase, consideró el investigador, pues el agua se traslada desde el río Santa María y la cortina se construyó en San Luis de la Paz, Guanajuato.

“El compromiso era entregar, mediante el acueducto, un metro cúbico por segundo a San Luis Potosí. Pero sucede que esa agua se inyecta en la red que ya opera en la ciudad (con rupturas y fugas) ¿Cuánta agua realmente se envía y cuánta realmente se entrega en los hogares?”.

Resumió que los proyectos hidráulicos suelen representar negocios buenos para los constructores y operadores, pero terminan haciéndose con fondos públicos.

“Acá es problemático, porque una empresa privada es la intermediaria y responsable del envío del agua”.

Aunque la Comisión Estatal del Agua (CEA) es quien debe revisar los desperfectos y fiscalizar la operación, lo cierto es que debemos preguntar primero por qué una empresa privada gestiona un bien público.

Esta construcción ha causado serios problemas legales y sociales, el organismo Intermunicipal de Agua Potable, Alcantarillado y Saneamiento (Interapas), informó que al menos pedirán cinco millones de pesos a la empresa administradora de la presa, derivado de los daños ocasionados en agosto por el mal funcionamiento de la presa.

Los fraccionamientos Del Llano, Valle Dorado, Esmeralda, Capricornio, Central, Industrias, Providencia, Españita, Maya Mil, Hermenegildo J. Aldana, Jardines del Sur, Ricardo B. Anaya I y II, Abastos I y II y Jardines de Oriente fueron afectados por la falta de suministro en la zona oriente.

En el sur, las colonias General I. Martínez, Himno Nacional I y II, Balcones del Valle y Graciano Sánchez I y II, son algunas de las colonias que se vieron severamente afectadas por la falta de agua.