¡Allez, allez! Francia es Bicampeón del Mundo

De héroes y villanos se componen la historias, sin embargo existe una delgada línea entre el bien el mal, cuando los protagonistas no siempre tienen la última palabra en la elección de su rol. Un día anotas el tanto que da el pase a tu país al Mundial, otro día anotas un autogol para poner en desventaja a tu equipo en la Gran Final, la tragedia de Mandzukic.

Sobre el terreno de juego, Croacia arrancó con mucha dinámica. Los balcánicos presionaban, jugaban a toda velocidad ante una Francia que se veía desconcertada ante el ímpetu de su rival. Perisic era un puñal por la banda izquierda, haciendo pasar dolores de cabeza a Pavard que solo veía la sombra del atacante del Inter.

Pero, las historias se caracterizan por sus giros dramáticos; al 19, Pitana marcó una polémica falta cuando los galos se acercaban al arco croata. Griezmann vino con un zurdazo en el tiro libre que fue desviado por Mario Mandzukic para abrir el marcador en Moscú.

Un duro golpe para una Croacia que no bajó los brazos. Al 27, Perisic se encontró con el balón tras una jugada a pelota parada, el extremo hizo un amague y sacó un potente tiro esquinado que venció a Lloris. Nacía un nuevo héroe que pronto se convertía en villano.

En el 35, Perisic metió la mano ante un cabezazo de Kanté; Pitana fue al VAR y pitó pena máxima en favor de Francia. Griezmann veía al cobro con los fantasmas de la Final de la Champions del 2015, esta vez el delantero no falló y ponía el 2-1 al 37.   

En la segunda mitad, el criticado Pogba puso el 3-1 con disparo a la entrada del área tras un rebote; Mbappe, el nuevo héroe galo puso la cereza al pastel con el 4-1. Pero Mandzukic se resarció cuando un error de Lloris en su exceso de confianza le regaló el balón al croata que ponía el 4-2.    

Croacia perdió a Modric que logró pesar cuando su equipo lo necesitó. Francia aguantó la embestida balcánica hasta el pitazo final. Segundo título francés, veinte después de su Mundial. La Galia canta y ‘Le 15 Juillet’ será recordado como la consagración de los nuevos héroes.