Indecisos podrían definir la elección

Se cree que el votante indeciso tiene la capacidad de decidir el rumbo de los comicios. La intervención de este fragmento de la población podría darle la victoria al candidato que, por el momento, tiene las de perder.

Hugo Alejandro Borjas García, politólogo de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí (UASLP), consideró que esto podría ocurrir con José Antonio Meade Kuribreña, candidato de la coalición Todos por México, integrada por los partidos PRI, PVEM y Panal.

Pese a que el aspirante a la silla presidencial se encuentra abajo en las encuestas de preferencia, la intervención de los indecisos podría darle un giro inesperado a las elecciones.

Borjas García señaló que incluso la tendencia ya se puede visibilizar, pues muchos de los indecisos se manifiestan en favor de Meade Kuribreña.

Parte de la opinión pública considera que el peso de las elecciones recae entre Andrés Manuel López Obrador, candidato por la coalición Juntos Haremos Historia (PT, Morena y PES); y Ricardo Anaya Cortés, de la coalición Por México al Frente, esta aseveración deja fuera de los reflectores a Meade y a Jaime Rodríguez Calderón alias "El Bronco".

El politólogo consideró que esta postura podría ser precipitada, pues la intervención de los que aún no tienen inclinación política podría cambiar de golpe los resultados finales.

"Meade no está fuera de la contienda, sabiendo que López Obrador tiene un puntaje que pareciera inalcanzable, sería muy difícil revertirlo, pero estamos en México, en México pasan cosas curiosas, el surrealismo de México supera cualquier cosa”.

Por el contrario, consideró que "El Broco" ya no tiene oportunidad, “Qué bueno que va con ese puntaje tan pobre, porque sí que daría escozor verlo en la Presidencia, por fortuna está hasta abajo, no tiene posibilidades y cada que toma un micrófono pierde más posibilidades”.

No es lo más pertinente borrar a Meade a estas alturas, ya que en el segundo debate mostró mayor elocuencia.

Tuvo respuestas mejor ubicadas, mostró mayor conocimiento que el resto de sus compañeros, se notó un poco más cómodo y más seguro, quizás no lograría mover los números de las encuestas, pero sí las elecciones.

Lo que considera el politólogo como un "negrito en el arroz" y algo que le va a pesar el resto de su vida, es haber asumido la representación del PRI.

A Meade le vendría muy bien tener un discurso de rompimiento con el gobierno de Enrique Peña Nieto, quizás esa sería una estrategia que podría darle el triunfo al candidato priísta.