Urge marco jurídico en favor de la mujer

San Luis Potosí, SLP.- Es muy importante, transmitirle a las autoridades, el grado de vulnerabilidad que puede tener una mujer cuando está siendo violentada por cuestiones de género, consideró el escritor Rafael Elizondo Gasperín.

Señaló que las principales herramientas para ejercer violencia política de género son: las redes sociales y los medios electrónicos. Estos espacios al no estar regulados, se convierten en campos para desprestigiar de una manera encarnizada a las funcionarias públicas o a quienes aspiran a llegar a un cargo de elección popular.

Las redes sociales son el terreno predilecto para denostar a las candidatas por su cuerpo, rostro, vestimenta, habla, forma de comunicarse y de presentarse ante la opinión pública.

Rafael Elizondo Gasperín, autor del libro “Violencia Política contra la Mujer: Una realidad en México”, reconoció que lamentablemente no hay un marco jurídico que garantice la protección de la integridad moral de las mujeres en las redes sociales.

“La mujer entre más cargos ejecutivos va logrando, más violentos se ponen contra ella los sucesos, es una espiral, desafortunadamente la violencia genera más violencia, esta transición de pasar de cargos meramente operativos a cargos ejecutivos, ha sido también producto de una constante lucha, de una evolución, pero también de una mutación de las formas de violentar a las mujeres”.

Es urgente un marco normativo integral para que se tipifiquen las agresiones contra las mujeres políticas dentro de un Código Penal.

“Así como el Instituto Nacional Electoral (INE) tiene la facultad de bajar o suspender un spot o una transmisión televisiva, así debería existir una herramienta legal que cuando esté acreditada la existencia de violencia política en redes, se baje la información”.

La falta de regulación es preocupante, después de los procesos electorales, los archivos continúan en la nube, conformando un historial de descrédito para las aludidas.

¿En qué otros ámbitos ocurren?

Las muestras de violencia no se reducen a la jornada electoral y no sólo la experimentan las contendientes, también se extiende contra consejeras y magistradas electorales.

Actualmente no hay una cifra estática y tampoco hay una entidad federativa que esté repuntando en el fenómeno, la violencia política está ocurriendo en todo el país.

Principales retos

-  Crear un marco normativo integral para que se tipifiquen las agresiones contra las mujeres políticas dentro de un Código Penal.

-  Pensar en los ejercicios subsecuentes de modificación integrales, pensando en los plazos.

-  Generar un expediente público de los agresores y agresoras.

-  Repensar si las instancias jurisdiccionales de los partidos políticos están realmente siendo eficaces.

-  Las demandas se deben hacer con perspectiva de género.