Benjamin Bratt tiene muy clara la razón por la que aceptó protagonizar la serie “The Cleaner”: “En la actualidad, la tv se basa sólo en dramas médicos o policiacos. Esos son los temas populares entre el público, además tienen una estructura similar. En cambio, cuando conocí el proyecto de ‘The Cleaner’ me di cuenta de que tocaba un tema que nadie se había atrevido a presentar en tv”.
En efecto, la serie ha tenido un gran impacto debido a que trata sobre una especie de asociación entre personas que, habiendo sido adictas a las drogas, ahora se dedican a rehabilitar drogadictos. Lo determinante de la historia es que su método no es el de la terapia o la persuasión racional, sino el choque emocional o incluso la violencia física.
“Es un tema que no se hubiera pensado siquiera hace 10 años en la televisión”, explica el actor, quien interpreta al líder de este grupo, llamado William Banks y que, de hecho, está basado en la vida real de Warren Boyd.
Por eso mismo los capítulos de la serie suelen ser calificados como crudos y tremendistas, ya que la vida misma de Boyd ha oscilado entre ambos adjetivos: a los 30 años ya había estado cinco años en la cárcel (en diferentes periodos) y había sido consignado nueve veces por abuso de drogas, especialmente alcohol y cocaína. Como la mayoría de los adictos, había pasado por muchos procesos de rehabilitación, 26 para ser exactos.
Hasta que un día, justo durante uno de sus periodos en prisión, su esposa le dio la noticia de que sería padre. Entonces gastó 15 meses en un programa de rehabilitación en el que se sometió a acciones extremas, similares (o iguales, incluso) a las que se presentan en la serie: “La adicción es un circulo vicioso que en mi caso sólo se pudo romper a través de ciertas terapias de choque físico. Ahora sé que no importa si eres una celebridad, un profesor de leyes o un albañil; las drogas destruyen por igual a todos”.
Y a partir de entonces dedicó su vida a desintoxicar drogadictos, incluyendo a muchas celebridades de Hollywood, como Robert Downey Jr., Courtney Love y Whitney Houston.
Hace dos años Bratt aceptó el reto de personificar a Boyd quien, por cierto, es el productor ejecutivo. El actor explica que fue un proceso muy “orgánico”.
“Debo ser sincero: no hice mucho trabajo de investigación acerca de la biografía de Boyd. La verdad es que basta con verlo para tener una idea muy clara de su forma de ser. Desde la primera inmpresión tienes muy claro el tipo de persona que tienes enfrente. Viste de negro, usa camisetas y maneja una motocicleta”.
Además, para él fue muy obvio que el personaje debía basarse mucho más en los guiones del libreto que en la vida real de Boyd. “Muy pronto me di cuenta de que mi vida tiene nada que ver con la suya y eso significó una ventaja porque resultó un reto ponerme en la cabeza de alguien que pensaba muy diferente”.
Hasta antes de “The Cleaner”, Benjamin Bratt formaba parte de esa larga lista de actores que parecen condenados a ser personaje secundario en películas de escaso éxito taquillero. Aún así, puede presumir que su filmografía suma 20 películas y que ha aparecido en series como “La ley y el orden” en aquellas primeras temporadas de la década de los 90.
Luego tuvo un momento de popularidad en la prensa del corazón cuando fue novio oficial de Julia Roberts. Puede decir que es uno de los pocos hombres de los que la actriz ha hablado abiertamente como novios. “Benjamin y yo solemos ir al cine; él es el hombre que hace mi vida más feliz”, declaró en aquella época Roberts, cuando filmó “Novia fugitiva”.
Bratt nació en San Francisco el 16 de deciembre de 1963. Es hijo de una enfermera peruana que también es militante del movimiento indigenista de su país y su padre es un obrero siderúrgico.
Luego de haber participado en “La ley y el orden”, su paso por Hollywood fue discreto. Su personaje más recordado fue el de policía medio torpe que acompaña a Sandra Bullock en “Miss Simpatía”, comedia sin mayor pretensión que explotar la popularidad de la actriz.
Luego, Benjamin actuó como Juventino Ariza en la adaptación cinematográfica de la novela de Gabriel García Márquez “El amor en los tiempos del cólera”.
Hasta que apareció “The Cleaner”, que actualmente transmite todos los domingos su tercera temporada. Boyd está feliz, no tanto por el éxito sino por lo que ha conseguido: “Me gusta pensar que la serie puede llegar a ayudar a alguien”.