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Kendrick Lamar por primera vez en México

Se presentó ante más de 73 mil almas en la 9ª edición del Bud Light Hellow Festival, uno de los eventos musicales y culturales más representativos del norte de México

Al menos 73 mil almas se reunieron en el emblemático Parque de la Fundidora, en Monterrey, Nuevo León, el pasado 26 de agosto para asistir a la 9ª edición del Bud Light Hellow Festival, uno de los eventos musicales y culturales más representativos del norte de México.

21 artistas se reunieron en la sultana del norte para ofrecer 13 horas de música, que sin interrupción, tendrían a los asistentes ávidos de música bailando y cantando.

La oferta era seductora: Distintos momentos del rock con LCD Soundsystem, Weezer, The Horrors; el poder regio de Kinky y Neon Indian; dignos representantes latinos como Jesse Baez y Helado Negro y muchos más hicieron del parque del metal una fiesta decorosa.

Sin embargo, en una noche de estrellas, fue sólo un astro quien se robó el firmamento. 39 ºC, una amenaza permanente de lluvia, escasez del líquido no vital más esencial (cerveza) y cientos de kilómetros, no impidieron que mexicanos volaran/manejaran/corrieran/nadaran para ver en vivo al rapero estadounidense que está haciendo historia: Kendrick Lamar.

El punto máximo de exaltación llegó a las 10:30 p.m., hora en la que Kendrick Lamar, apareció en el escenario con una puntualidad honorable para el registro histórico (y emotivo) de su primera vez tocando en México.

Se aseguró de que supiéramos que el sabía que ésta era una primera vez colectiva, una primera vez muy mexicana.

Desde la soledad del escenario y rodeado de un humo blanco disparó sus primeras palabras "I got, I got, I got, I got loyalty, got royalty inside my DNA". Lamar hizo retumbar los jardines del norte y el público implotó en júbilo. La gente gritaba su nombre, coreaba sus canciones y bailaba a su ritmo.

'King Kunta', 'Collard Greens", 'Loyalty', 'Bitch, Don´t Kill my vibe, y una epopeya hecha música como la versión a capella de 'Humble' quedaron en los anales de la música.

Lograr una edición como ésta por parte del Bud Light Hellow Fest, no sólo fue un acierto, sino un mérito casi insuperable. Más de una persona les agradecerá por haber traído a Kendrick Lamar por primera vez a México.

 

 

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