San Luis Potosí, SLP.- El 10 de enero de 1897. Nace en Tampamolón Corona, SLP, Gonzalo N. Santos Rivera “El Alazán Tostado”. Sus padres fueron don Pedro Antonio Santos y doña Isabel Rivera de Santos. Junto a sus hermanos Samuel, Pedro Antonio, Miguel y María Concepción conformaban la familia Santos Rivera.
Gonzalo tenía 13 años cuando estalló la Revolución, de la cual, su hermano Pedro había sido precursor. Gonzalo fue soldado desde muy joven en las tropas carrancistas; pero fue durante el período de Plutarco Elías Calles cuando se da a conocer ampliamente.
Fue Diputado entre 1924 y 1934, durante cinco legislaturas. La segunda vez, de 1926 a 1928, fue el período en el cual presidió la Gran Comisión.
Fundador y miembro del primer Comité Ejecutivo Nacional del PRM; Partido de la Revolución Mexicana (primer nombre del PRI), estuvo y formó parte de él aquel 4 de marzo de 1929, en el momento mismo de la iniciación de este importante partido político nacional.
Pocos como él estuvieron tan dentro del círculo de amistades del general Lázaro Cárdenas del Río.
Hacía el año de 1934 fue elegido Senador de la República, tiempo en el que muy sigilosamente se fue convirtiendo muy cercano al general Cárdenas, consolidando la amistad cuando el general Saturnino Cedillo se distanció de Cárdenas al rebelarse en el año de 1938.
Santos tomó su lugar al lado del gobierno cardenista, rechazando la sublevación cedillista, la cual fue finalmente derrotada.
A la caída del cacique Saturnino Cedillo, Santos, apoyado desde el centro político del país, inició el establecimiento de su propio domino feudal en San Luis Potosí.
Al concluir su período senatorial, fue enviado a Bélgica como Ministro. De allí regresó para hacerse cargo de la gubernatura potosina, de la que tomó posesión el 26 de septiembre de 1943.
Anecdótico, dicharachero, extrovertido, como todo huasteco; venía periódicamente a Tamazunchale, donde tuvo grandes amigos que participaron con él en la Revolución de 1910 y en la lucha contra el levantamiento “Cristero” en varios estados de la república.
Considerado de “mano dura” y acusado por sus detractores de practicar la violencia; Los vasconcelistas lo tuvieron como una “bestia negra”. Sin embargo en su período de gobernador y durante su cacicazgo, hubo orden y respeto, porque el que “la hacía la pagaba”.
Su lema siempre fue: "Como el Alazán Tostado, Primero Muerto que Cansado". Son célebres su frase de: "la moral es un árbol que da moras" y sus "ierros" que aplicaba a sus enemigos (encierro, destierro y entierro).
Cambió su nombre de Gonzalo Santos a Gonzalo N. Santos. "La N. no tiene significado. Es para no tener un nombre de 13 letras porque quienes los tienen, mueren asesinados y yo quiero morir en mi cama," escribió en sus Memorias, publicadas de manera póstuma