Marisela Morales, quien
tuviera a su cargo la investigación de casos como el del asesinato del cardenal
Juan Jesús Posadas Ocampo y el proceso de desafuero del ex jefe de Gobierno del
Distrito Federal, Andrés Manuel López Obrador, fue designada titular de la
Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada
(SIEDO) de la PGR, a petición del procurador Eduardo Medina Mora.
A través de un comunicado de
prensa, el procurador aseguró que “los secuestros, delito que se registra en el
ámbito de competencia de las procuradurías de los estados y del Distrito
Federal, será objeto de una atención especial y prioritaria con mayores
esfuerzos de coordinación y colaboración de la Procuraduría General de la
República con las autoridades responsables de las investigaciones en los
estados”.
El ex titular de la SIEDO,
Noé Ramírez Mandujano, fue enviado a la representación que tiene la
Procuraduría General de la República, en la representación diplomática de
México ante la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga con sede en
Viena, Austria, máximo organismo internacional especializado de la ONU en
delincuencia organizada.
Mientras que en el caso de
José Luis Santiago Vasconcelos, actual responsable de la Subprocuraduría
Jurídica y de Asuntos Internacionales de la institución, la PGR se limitó a
informar que “ocupará otra responsabilidad en el servicio público”, por lo que en
breve se dará al funcionario que ocupará su lugar.
Los demás subprocuradores,
el visitador general, la fiscal especializada para la Atención de Delitos
Electorales y el oficial mayor, fueron ratificados en sus cargos.
El proceso de reordenamiento
que inició el procurador Eduardo Medina Mora en la Procuraduría General de la
República, se afirmó, busca eficientar la coordinación a nivel federal y
estatal en la lucha contra de la delincuencia organizada.
Como resultado del proceso
que inició, con el visto bueno del presidente Felipe Calderón, de acuerdo con
información oficial de la dependencia, se espera que se tengan mejores
resultados en la lucha contra la delincuencia, en especial en casos como el de
los secuestros, tráfico de personas y lavado de dinero.