Un pueblo mestizo y con una mezcla racial tan generalizada como el puertorriqueño se acerca a la perfección humana
El ser humano perfecto, a nivel genético, tendría que ser puertorriqueño, gracias a su mezcla de herencia española, africana y taína, según el estudio realizado por un biólogo de la Universidad estadounidense de Berkeley. "No quiero decir que el puertorriqueño actual sea un hombre o una mujer perfectos, porque ningún grupo humano lo es”, explicó ayer el científico Lior Pachter, cuya afirmación fue recibida con gran sentido del humor entre los simpáticos habitantes de esta isla caribeña.
Desde su oficina de California, Pachter explica que puso en marcha la investigación tras compartir mesa, por casualidad, con James Dewey Watson en marzo de 2004. Watson, premio Nobel de Medicina de 1962 por sus trabajos sobre la estructura de la molécula de ADN, se pasó la noche haciendo comentarios racistas y homófobos que desagradaron a Pachter.
En cambio, con sus investigaciones, él llegó a la conclusión de que un pueblo mestizo y con una mezcla racial tan generalizada como el puertorriqueño tiene las mayores posibilidades de acoger a lo más parecido al "humano perfecto”. Carga genética Pachter va más allá y asegura que el individuo concreto que se correspondería con el humano perfecto es uno con la carga genética del código HG00737 y asegura que éste ya existió.
Al resultar de su análisis que el ser humano perfecto era, en concreto, una mujer puertorriqueña, Lior Pachter explica que la imaginó como la taína Yuiza (Loíza), que llegó a ser cacique de su tribu, algo poco muy poco habitual para una mujer.
Ésta es la respuesta científica de Pachter a los comentarios del Nobel de Medicina, que ha unido su carrera a la obsesión por mejorar lo imperfecto en la genética, según recordó el investigador, cuya afirmación ha desatado todo tipo de bromas entre los propios puertorriqueños.
Las claves de la investigación de Pachter
Ejemplos Jennifer López, nacida en Nueva York pero de origen puertorriqueño, y Ricky Martin son ejemplos de perfección puertorriqueña.